Comunicar en español la vida de la IglesiaEl idioma español se está volviendo indispensable para quien sigue el Vaticano y la Santa Sede. El papa Francisco está dictando su agenda a los medios de comunicación en todo el mundo; escapando de la dictadura de la agenda-setting impuesta desde lo alto, utilizando un lenguaje sencillo, directo y concreto. Periodistas expertas desde el Vaticano sostienen que Francisco está revolucionando la comunicación vaticana sin desvincularse de su bagaje (cultural y pastoral) anterior y enraizado en las periferias de Buenos Aires y su amor por los pobres. En este sentido, papa Bergoglio parece estar dando nueva linfa y vigor a la información eclesial.
De todo esto y más se habló el pasado 23 de septiembre en el Hotel NH Giustiniano de Roma. El Observador independiente Mediatrends América-Europa organizó un desayuno de trabajo para un grupo de periodistas y diplomáticos latinoamericanos que prestan servicio en la Ciudad eterna y en la Ciudad del Vaticano para analizar el tema “Comunicar en español la vida de la Iglesia”.
A pocos pasos del histórico escenario del Castillo de Sant’Angelo, los presentes escucharon las intervenciones de las periodistas Silvina Pérez, directora de la edición semanal de L’Osservatore Romano en español, y Mercedes de la Torre, periodista de Radio Vaticano en español, quien habló de su trabajo cotidiano, inicialmente como ex corresponsal en medios laicos y ahora al servicio de la emisora del Sucesor de Pedro.
“El Papa nos ha hecho sentir a todos parte de este pontificado y de la historia que la Iglesia está viviendo”, dijo Silvina Pérez al explicar la responsabilidad que tiene el periódico de la Santa Sede, fundado en 1861, como voz escrita y oficial del Papa. Entender, prosiguió, el peso que tiene cada palabra publicada en la narración de los acontecimientos de la Iglesia y del mundo.
Así, en los diarios italianos recientemente se ha publicado e interpretado de manera masiva “una pequeña noticia publicada en L’Osservatore sobre el mal tiempo en Roma que se ha convertido en un debate político que ha durado tres días”, constató la periodista argentina. Todo con fines particulares y lejanos a la verdadera posición de la Santa Sede, confirmó.
“Yo siento el peso de 155 años de historia de L’Osservatore Romano que en América equivale a la independencia de algunos de nuestros países”, afirmó.
La primera edición en español del diario del Papa, por iniciativa de la Iglesia local, se hizo en Argentina en 1969 y luego se centralizó.
Además, destacó el impulso del Papa para plantear en el Vaticano un proceso de entendimiento de la riqueza cultural de América Latina que va más allá de una visión “folclorista” de la región.
El lenguaje porteño del Papa argentino durante sus alocuciones era al principio traducido al castellano más clásico y esto- señaló Pérez- convierte en una especie de “caricatura” la forma de sentir y expresarse tan auténtica de Bergoglio. Algo que irá cambiando de manera armónica mientras se afina la reforma y su operatividad.
Asimismo, Pérez reiteró que la dirección de L’Osservatore Romano en español está comprometida –consecuentemente con la reforma de los medios de comunicación vaticanos- en dar voz a las realidades eclesiales más periféricas del Continente de la Esperanza.
Pérez reconoce que la Iglesia latinoamericana ya estaba “un paso adelante” y en sintonía con el lenguaje actual de la misericordia de Francisco bajo la secuela del documento de Aparecida de 2007. “El papa Francisco se trajo un buen bagaje pastoral y esto sorprende gratamente a la Iglesia en Roma”.
Por otro lado, opinó que el papa Francisco, con su manera de comunicar a través de gestos y hechos, está “dictando la agenda a los medios de comunicación internacional […] a pesar de que vivimos en una sociedad de la información fragmentada”.
No obstante, subrayó, “casi a diario los periódicos del mundo informan” sobre lo que dice y hace el Papa.
Por su parte, De la Torre reafirmó que el Papa es un gran comunicador y comprende la necesidad de hablar un lenguaje sencillo y crear imágenes con sus palabras, sin embargo “el papa no ve televisión desde los años noventa”. Esto debido a un voto.
Así recordó los gestos y silencios del Papa como parte de su fuerza comunicativa en momentos emblemáticos como su abrazo junto con el Rabino Skorka y su amigo musulmán Omar Abboud frente al muro de las Lamentaciones en Jerusalén, entre otros momentos destacables.
También evidenció la capacidad de trabajo del Papa de 79 años y su gran humanidad, la cual tiene precedentes en las experiencias pastorales con los más pobres en las Villas de Buenos Aires –donde Mercedes de la Torre ha inspeccionado en persona esta opción pastoral de Bergoglio entrevistando los habitantes de esos barrios- y también momentos menos conocidos de la vida del jesuita como su retiro en Córdoba.
Estuvieron presentes en el evento María Elvira Velásquez Rivas-Plata, embajadora del Perú ante la Santa Sede; Mariano Fernández Amunátegui, embajador de Chile ante la Santa Sede; Marco Vargas Pereira, embajador de la República de Costa Rica ante la Santa Sede; Luis La Torre, embajador de la República del Ecuador ante la Santa Sede; Francisco José Ottonelli embajador de la República Oriental del Uruguay ante la Santa Sede; Rogelio Pfirter, embajador de la República Argentina ante la Santa Sede y diversos miembros del cuerpo diplomático.
Mediatrends America – Europa es un Observatorio independiente que estudia las tendencias de la información internacional y que nació gracias a la iniciativa de algunos periodistas, analistas y expertos residentes en Roma.
El Observatorio se propone analizar los puntos de vista más significativos en el contexto de los medios, desde las diferentes culturas periodísticas, para favorecer la colaboración y la sinergia entre periodistas que trabajan en Europa y en América.