Según Amy Morin, psicoterapeuta y autora del libro “13 cosas que las personas mentalmente fuertes no hacen”, hay personas que se rinden al primer signo de contrariedad. Un pinchazo, una previsión de lluvia o tener que hacer una fila pueden estresarlas durante un largo período de tiempo. Otras personas, sin embargo, se mantienen de pie ante cualquier desafío que la vida pone en su camino. Tienen una increíble habilidad de transformar los retrocesos y enfrentar con valor las dificultades.
Amy elaboró en su libro la lista de las ocho maneras como las personas mentalmente fuertes no dejan que el estrés acabe con ellas:
Aceptan que el estrés forma parte de la vida: Las personas mentalmente fuertes no se quedan preguntando: “¿Por qué siempre me pasan estas cosas?” En vez de eso, saben que el estrés forma parte de la vida cotidiana y aceptan que los obstáculos y problemas son parte de la jornada.
Reconocen los primeros síntomas del estrés: En vez de ignorar o subestimar los síntomas del estrés, las personas mentalmente fuertes están atentas a las maneras como éste influye en su humor, su actitud e incluso su cuerpo. Usan esa información para generar cambios positivos antes que sean completamente vencidas por el estrés.
Eligen ver el estrés como una oportunidad: Los momentos difíciles pueden derrumbarte, pero también pueden una oportunidad para crecer. Las personas mentalmente fuertes ven el estrés como una oportunidad de ejercitar tu musculatura mental. A cada desafío, luchan por salir más fuertes y se comprometen a mejorar.
Buscan ayuda cuando lo necesitan: Ellas saben que pedir ayuda no es un signo de debilidad: es un signo de fortaleza. Personas mentalmente fuertes conocen sus limites y no temen buscar una mano amiga cuando lo necesitan.
Modifican su ambiente: En vez de enfrentarse a un estrés innecesario a causa del ambiente que les rodea, esas personas mentalmente fuertes están abiertas a hacer cambios. Saben que a veces un pequeño cambio en el ambiente puede marcar una diferencia enorme en su nivel de estrés. Sea escogiendo sentarse cerca de un colega más positivo u optando por no participar en una reunión que sólo les produzca dolor de cabeza, ellas se dedican a cosas que pueden controlar.
Se acuerdan de divertirse: Una de las mejores formas de combatir las emociones negativas es experimentando sentimientos positivos. Las personas mentalmente fuertes participan en actividades lúdicas, se rodean de personas positivas y arrancan tiempo para dedicar a los que aman. Cuanto más estrés experimentan, más diversión deciden tener.
Cambian de canal: A menos que estén trabajando para resolver activamente un problema, las personas mentalmente fuertes no pierden el tiempo pensando en sus dificultades. Cuando se ven lamentando sus problemas o ahogándose en su negatividad, cambian de canal en sus mentes, de forma proactiva. Se distraen en actividades positivas que den alivio inmediato al estrés.
Mantienen sus metas a largo plazo en la cabeza: Aunque un plazo corto o un proyecto difícil puedan dar un poco de estrés hoy, las personas mentalmente fuertes saben que esos problemas son pequeños en el gran esquema de la vida. Se enfocan en sus metas a largo plazo y así mantienen los problemas de hoy en perspectiva.
(via Sempre Família)
Hoy celebramos a...