No es cuestión de mucho tiempo: lo que de verdad importa es encontrar un tiempo de silencio a solas con Dios
“Dije a mi alma: ten calma”. – T.S. Eliot
Cada vez que confieso a la gente que tengo el privilegio de pasar ocho espléndidos días con Jesús todos los años, a menudo recibo miradas envidiosas. En especial de madres con muchos hijos. Y lo entiendo de veras.
Pero antes de que idealices mi vida, recuerda que toda vocación tiene sus pros y sus contras (no voy a revisar ahora los contras de vivir con otras 80 mujeres, pero creo que ya te podrás hacer una idea).
En cualquier caso, vamos al grano. La mayoría de la gente que me fulmina con ojos de envidia no se imagina que los retiros, en realidad, están también al alcance de las personas laicas. En serio.
Si te tomas un día o medio día al mes de retiro (¡o incluso un par de horas!), te ayudará en tu vida espiritual.
Puede que estés pensando, “sí claro, pero ¿qué es medio día comparado con ocho?”. Pero Dios no se para en estas minucias.
Si te pasas la mitad de tu tiempo cambiando pañales, Dios no va a limitar la gracia que te ofrece sólo porque no dispongas del lujo de poder dedicarle toneladas de tiempo en exclusiva para Él.
San Ignacio, creador de los Ejercicios Espirituales que se usan en tantísimos retiros, afirmó que una hora de oración en una cueva de Manresa le había enseñado más sobre los misterios de Dios “que lo que pudiera haber aprendido de todos los doctores de las escuelas”. Una hora, damas y caballeros.
Así que de verdad merece la pena buscar el tiempo para un “mini retiro” este mismo mes. Aunque sólo sea una mañana.
Si tienes tiempo para ver Netflix varias veces a la semana o para mirar tu teléfono durante lo que al final terminarán siendo varios años de tu vida (tío… tengo que dejar de embobarme tanto con el móvil), ¡entonces sí que tienes tiempo para un mini retiro!
Aquí tienes cinco pasos que puedes seguir para un retiro casero:
Apaga el teléfono
Lo digo en serio. A no ser que seas un cirujano de guardia o exista una posibilidad real de emergencia, cualquiera puede desconectar del teléfono al menos durante medio día. Guarda el móvil en la guantera del coche si tiene que estar a mano; si no, mejor dejarlo en casa. Del mismo modo, aléjate del correo electrónico, de los ordenadores, de las tablets, de la radio… Tanto como puedas, tienes que buscar auténtico silencio en el corto periodo de tiempo de que dispones para dedicarlo a Dios. Porqué Él nos habla en el silencio.
Empieza el día yendo a misa (o siguiéndola en directo desde tu casa)
Usted está leyendo este artículo gracias a la generosidad suya o de otros muchos lectores como usted que hacen posible este maravilloso proyecto de evangelización, que se llama Aleteia. Le presentamos Aleteia en números para darle una idea.
20 millones de lectores en todo el mundo leen Aletiea.org cada día.
Aleteia se publica a diario en siete idiomas: Inglés, Francés, Italiano, Español, Portugués, Polaco, y Esloveno
Cada mes, nuestros lectores leen más de 45 millones de páginas.
Casi 4 millones de personas siguen las páginas de Aleteia en las redes sociales.
600 mil personas reciben diariamente nuestra newsletter.
Cada mes publicamos 2.450 artículos y unos 40 vídeos.
Todo este trabajo es realizado por 60 personas a tiempo completo y unos 400 colaboradores (escritores, periodistas, traductores, fotógrafos…).
Como usted puede imaginar, detrás de estos números se esconde un esfuerzo muy grande. Necesitamos su apoyo para seguir ofreciendo este servicio de evangelización para cada persona, sin importar el país en el que viven o el dinero que tienen. Ofrecer su contribución, por más pequeña que sea, lleva solo un minuto.