El 20 de julio del pasado año de 2015, la NASA publicó las primeras imágenes del lado iluminado de nuestro planeta, tal y como fueron captadas por la cámara EPIC de la agencia espacial, desde el satélite DSCOVR, de la NOAA (“National Oceanic and Atmospheric Administration”, la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica de los Estados Unidos). La cámara logró grabar aproximadamente tres mil imágenes correspondientes a un año completo de vida en la Tierra, orbitando en el llamado punto “Lagrange 1”, ubicado aproximadamente a un millón de millas de distancia de la Tierra, justo donde la gravedad de nuestro planeta y la del sol son iguales entre sí, equilibrándose la una a la otra.
La cámara EPIC toma una nueva imagen cada dos horas, mostrando cómo el planeta se vería a esa distancia. Al hacerlo, captura el movimiento de las nubes y de demás sistemas meteorológicos, en constante cambio, que contrastan con las características fijas de la tierra: desiertos, los bosques y los distintos tonos de azul de mares y océanos. Esta cámara permite ahora a los científicos monitorear los niveles de ozono y gases en la atmósfera de la Tierra, lo mismo que la altura de las nubes, las propiedades de la vegetación y los niveles de radiación ultravioleta, con fines meteorológicos vinculados también a la conservación ambiental.