El papa Francisco manifestó su duelo por las 19 personas asesinadas este martes 26 de julio en una residencia de discapacitados cerca de Tokio en un apuñalamiento masivo cometido por un ex trabajador del centro.
El mensaje del Pontífice fue enviado a través del Secretario de Estado, el cardenal Pietro Parolin, dirigido al arzobispo de Tokio, Peter Takeo Okada.
En la misiva el Pontífice se declara “entristecido” por la pérdida de vidas tras el ataque en las instalaciones de Tsukui Yamayurien para minusválidos.
“Su Santidad Francisco asegura a todas las víctimas de la tragedia su cercanía, y envía condolencias a los familiares de los fallecidos y de los heridos”, se lee.
Asimismo, el Obispo de Roma asegura su oración en estos “momentos difíciles” para que los heridos se recuperen. Así, invocó sobre ellos y sobre la nación japonesa las “bendiciones divinas de la reconciliación y la paz”.
Según el diario The Japan News, el presunto atacante sufría de trastornos psiquiátricos y había recibido tratamiento.
La tragedia tuvo lugar a las 2.10 hora local cuando un joven (26 años) ocupó la residencia de discapacitados Tsukui Yamayuri y mató a cuchilladas a 19 personas y dejó heridas a otras 25.
El atacante (aún sin identificar), se entregó en una comisaría después del delito, donde se declaró culpable. Las autoridades informan que el hombre decía querer las personas minusválidas muertas y se justificó con la aplicación de la “eutanasia”.
Las víctimas del ataque son personas de entre 18 y 65 años que trabajaban o eran huéspedes de la estructura.
El joven había trabajado en el centro de la masacre hasta febrero, cuando lo abandonó por motivos personales, señaló un portavoz de la alcaldía de Sagamihara, Japón.
Una jornada sombría: el papa Francisco había ya manifestado su dolor y condena por el ataque a una iglesia de Rouen, Normandía, en que un sacerdote fue degollado.
Hoy celebramos a...