Un proceso que ha sido ya calificado de “purga” alcanza sectores que el gobierno de Erdogan no había tocado anteriormente
Las severas medidas que el gobierno turco ha adoptado en los días posteriores al fallido golpe de Estado contra el gobierno de Erdogan, han tomado dimensiones insospechadas y sin precedentes el día martes: el proceso que ya ha sido calificado de “purga”, y que hasta ahora había alcanzado a la policía, al sistema judicial y a las fuerzas armadas, llegó al sector educativo, en una serie de despidos masivos que han dejado a decenas de miles de maestros sin sus licencias, y a los decanos de todas las universidades del país en estado de suspensión, al exigírseles la entrega de sus cargos, según se lee en una nota publicada por The Telegraph.
Son ya decenas de miles de funcionarios públicos los que han perdido sus puestos de trabajo, en tanto el gobierno turco persigue a los seguidores de Gülen, el clérigo radicado en los Estados Unidos al que el gobierno de Erdogan acusa de orquestar el golpe de estado fallido, cuyo movimiento se dice que se ha infiltrado en las instituciones del Estado.
Hoy martes, el Ministerio de Educación turco suspendió a 15.200 empleados de sus puestos de trabajo, mientras que el Consejo de Educación Superior estatal exigió la renuncia de 1.577 decanos universitarios: todos los administradores de universidades, tanto estatales públicas como privadas, de Turquía.
El canal de televisión turco NTV informó que el ministerio canceló las licencias de enseñanza de 21.000 empleados que trabajan en instituciones privadas del sector educativo.
Estas suspensiones están en la misma línea de la “purga” iniciada el lunes, que hasta ahora se había concentrado en otros ministerios e instituciones estatales.
Hasta ahora, aparte de los del sector educativo, los empleados despedidos incluyen 9.000 policías, 2.745 jueces, 8.777 empleados del Ministerio del Interior, 1.500 del Ministerio de Finanzas, 257 empleados de la oficina del primer ministro, 399 del Ministerio de Familia Asuntos Sociales, y 492 del Ministerio de Asuntos religiosos.