Alberga las tumbas de dos de los grandes poetas de la lengua portuguesa: Camoes y PessoaAdemás de por los célebres pasteles de nata, Belém, en Lisboa, es conocida por ser la casa del que quizá sea el más famoso monumento de estilo Manuelino del país, el Monasterio de los Jerónimos, la cumbre del llamado “gótico tardío” portugués.
Antes de la construcción del monasterio, en el lugar se encontraba una pequeña ermita fundada por Enrique el Navegante, la llamada Ermida Do Restelo (también conocida como Santa María de Belém, según algunas fuentes), en donde Vasco Da Gama y su tripulación pasaron la noche antes de partir a India.
Al volver de su viaje a salvo, el rey Manuel I de Portugal mandó al arquitecto Juan de Castillo construir el monasterio, para conmemorar el triunfal regreso de Da Gama. Hoy, el monasterio está considerado como patrimonio de la humanidad.
El Monasterio de los Jerónimos (una antigua Orden que se rige por la Regla de San Agustín, aunque inspirados por San Jerónimo) es también el lugar en el que descansan eternamente algunos de los más famosos personajes históricos y literarios del país.
Obviamente, aquí se encuentra la exquisita tumba del navegante portugués Vasco de Gama (1460-1524) un impresionante homenaje al primer europeo en llegar a India por vía marítima en 1497.
Cerca de la de Da Gama, se encuentra la tumba del famoso poeta Luis de Camões (1527-1580), considerado el “Shakespeare portugués”, y conocido por Os Lusíadas, un poema de inspiración homérica a propósito de la exploración marítima portuguesa, no exenta de cierto toque fantástico. Tiene todo el sentido del mundo que sus restos descansen junto a los de Da Gama.
Pero, además, en el mismo monasterio se encuentra la tumba del más grande de los poetas portugueses de la era moderna, Fernando Pessoa (1888-1935).
Nacido en Lisboa, su ciudad natal lo reverencia sin ambages: su estatua, junto al café que el escritor frecuentaba, es uno de los destinos más turísticos más populares del distrito de Chiado.
Varios miembros de la casa real de Aviz, que gobernó Portugal hasta 1580, están también enterrados en la catedral del monasterio: los reyes Manuel I (1469-1521), Juan III (1502-1557), y Sebastião (1557-1578), las reinas María de Aragón (1482-1517), esposa de Manuel I y la reina Catalina de Austria (1507-1578), esposa de Juan III.
En términos de arquitectura, el Monasterio de los Jerónimos es un brillante ejemplo del estilo “Manuelino”, también conocido como “gótico portugués”, rico en elementos propios del gótico tardío, y con algunos que otros que parecen predecir el arribo del barroco europeo.