El Director de la Sala de Prensa de la Santa Sede, el padre Federico Lombardi, hizo una declaración sobre el pesar y cercanía de Papa Francisco por la matanza perpetrada en la ciudad estadounidense de Orlando, en la que perdieron la vida 50 personas y otras tantas resultaron heridas.
«La terrible masacre ocurrida en Orlando —indicó—, con un número altísimo de víctimas inocentes, suscitó en el Papa Francisco y en todos nosotros los sentimientos más profundos de execración y de condena, de dolor y de turbación ante esta nueva manifestación de locura homicida y odio insensato».
Papa Francisco «se une en la oración y en la compasión al sufrimiento indecible de las familias de las víctimas y de los heridos y los encomienda al Señor para que puedan encontrar consuelo. Todos esperamos que se puedan identificar y combatir eficazmente lo antes posible las causas de esta violencia horrible y absurda, que turba tan profundamente el deseo de paz del pueblo estadounidense y de toda la humanidad».