Tras los atentados de Bruselas y en el contexto de la semana santa, el Pontífice invitó a confortar a los corazones afligidoshttps://youtu.be/ulJPydvpONM
El papa Francisco invitó a “confortar los corazones afligidos” por el terrorismo y rezar para que se conviertan las “personas cegadas por el fundamentalismo cruel”.
Después del mensaje enviado ayer, Francisco dirigió un llamado contra la cultura de la muerte detrás de los atentados en Bruselas reivindicados por el ISIS (Califato islámico), durante la audiencia general en Plaza de San Pedro de este miércoles 23 de marzo de 2016.
“Me he enterado con corazón adolorado de los atentados ocurridos ayer en Bruselas y que han causado numerosas víctimas y heridos…aseguro mi oración y cercanía a la amada población belga, a todos los familiares de las víctimas y a todos los heridos”, comentó el Papa.
El balance del terror, hasta el momento, según el ministro de salud belga, Maggie De Block, es de 31 muertos y alrededor de 250 heridos. En la tarde del martes varias agencias informaban de 34 víctimas.
“Dirijo nuevamente un apelo a todas las personas de buena voluntad a unirse en la unánime condena de estos crueles hechos que están causando muertes, terror y horror”.
“A todos les pido de perseverar en la oración y de pedir al Señor en ésta Semana Santa de confortar los corazones afligidos y de convertir el corazón de éstas personas cegadas por el fundamentalismo cruel“, añadió.
Una día gris recibió a los peregrinos presentes en la Plaza de San Pedro, al mismo tiempo que fue evidente la intensificación de los controles de seguridad de la policía italiana y de la gendarmería vaticana luego de los atentados de este martes en la capital de Bélgica.
El Papa celebrará todos los ritos de Semana Santa
Encomiendo a la misericordia de Dios las personas que han perdido la vida. #Bruselas
— Papa Francisco (@Pontifex_es) March 22, 2016
El jefe de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, Federico Lombardi, confirmó este martes que el Papa Francisco no cambiará su agenda de cuatro días de celebraciones intensas, un total de siete, en ocasión de la Semana Mayor.
Asimismo, papa Francisco lavará los pies a 12 refugiados de un Centro de primera acogida ubicado a las afueras de Roma. El Pontífice en otras ocasiones ha llamado a que las instituciones apoyen las medidas humanitarias para asistir a los prófugos.
El gesto del rito de Jueves Santo, se convierte, asimismo, en un símbolo de la acogida y servicio que se espera de Europa para los refugiados que escapan de zonas de guerra y que pueden ser ‘objeto’ de campañas políticas xenófobas y extremistas que mueven la bandera del ‘anti-terrorismo’.
Por otro lado, el Papa continuó la serie de catequesis sobre la misericordia de Dios y, en ocasión de la Semana Santa, habló del significado del Triduo Pascual.
“Tres días intensos que nos hablan de la misericordia de Dios, pues hacen visible hasta dónde puede llegar su amor por nosotros”, expresó.
“El Triduo Pascual es el memorial de un drama de amor que nos da la certeza de que nunca seremos abandonados en las pruebas de la vida”.
De esta manera, indicó el Evangelio de San Juan: “Jesús, habiendo amado a los suyos que estaban en el mundo, los amó hasta el extremo”.
Sucesivamente, explicó los tres días que hacen de ante sala a la resurrección de Jesús. “El Jueves Santo, con la institución de la Eucaristía y el lavatorio de los pies, Jesús nos enseña que la Eucaristía es el amor que se hace servicio”.
“El Viernes Santo, llegamos al momento culminante del amor, un amor que quiere abrazar a todos sin excluir a nadie con una entrega absoluta”.
“El Sábado Santo, es el día del silencio de Dios, Jesús comparte con toda la humanidad el drama de la muerte, no dejando ningún espacio donde no llegue la misericordia infinita de Dios”, constató.
De ahí, sostuvo que el Sábado Santo, es el día en que “el amor no duda, sino que espera confiado en la palabra del Señor hasta que Cristo resucite esplendente el día de pascua”.
Por ello, se refirió a la Virgen como icono de ese Sábado Santo. “Nos hará bien guardar silencio, cómo lo ha hecho ella”.
“Este es nuestro Jesús que a cada uno de nosotros nos dice: Si pudiera sufrir más por ti lo haría”, reiteró Francisco.
“Un amor inmenso y sin limites que el Señor tiene por cada uno de nosotros”.
El Papa invitó a dejarse envolver por este amor misericordioso. “Acojamos en nuestro corazón su amor y, como la Virgen guardemos silencio a la espera de la resurrección”, concluyó.