Un hecho inusitado, quizá atribuible al llamado del papa Francisco a las familias mexicanas a “echarle ganas” y defender la estructura de la familia contra los embates de quienes quieren verla disuelta, se produjo esta semana en México.
El Consejo Mexicano de la Familia (ConFamilia), una asociación de personas de la sociedad civil, presentó ante la Mesa Directiva de la Cámara de Senadores más de 200 mil firmas de ciudadanos que avalan la primera iniciativa ciudadana de una organización no gubernamental en la historia del país.
La iniciativa busca reformar el artículo 4º Constitucional basándose no en otro concepto sino en el emanado por la Declaración Universal de los Derechos Humanos.
Respuesta extraordinaria
ConFamilia tuvo su origen en Monterrey, Nuevo León, y ahora está domiciliado en la Ciudad de México. En la actualidad, cuenta con más de 250 mil simpatizantes en más de 50 ciudades de la república.
El proceso de recolección de firmas inició a fines de agosto de 2015; y se fueron sumando los colaboradores de manera espontánea; logrando cubrir todos los estados de la república y rebasar el requisito del Congreso y del Instituto Nacional Electoral para darle validez a una iniciativa de este tipo en tan solo cuatro meses.
“Tuvimos una respuesta excelente, logrando muchas más firmas de las que marca la ley. Esto nos hizo ver que realmente existe en la sociedad una verdadera preocupación por lograr el fortalecimiento de la familia”, expresó el presidente de ConFamilia, Juan M. Dabdoub Giacomán.
Explicó Dabdoub Giacomán que en la iniciativa se solicita a los legisladores que se reconozca al matrimonio como una institución de interés público y fundamento natural de la sociedad. “Para que sea protegidos por el Estado mexicano, que es el principal objetivo de la reforma”, añadió.
Velar por la familia
Lo que se incluye en el artículo cuarto de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, ya encuentra respaldo en los tratados internacionales sobre Derechos Humanos suscritos por México.
En este proyecto de ley, entre otros temas, se plantea que en todas las decisiones y actuaciones del Estado se vele por el desarrollo de la familia, para que esto constituya el principio que guíe el diseño, ejecución y evaluación de las leyes, programas y políticas públicas de los tres órdenes de gobierno y los poderes de la unión.
Además, se exige a los legisladores que reconozcan el derecho preferente de los padres a escoger el tipo de educación que habrá de darse a sus hijos, tal y como lo establece la Declaración Universal de Derechos Humanos.
Mejores ciudadanos
Dabdoub Giacomán dijo, tras el suceso histórico que tomó a la Cámara de Senadores como Cámara receptora de la iniciativa, que es “insostenible el nivel de deterioro de las familias mexicanas, ya que el país ocupa muchos vergonzosos primeros lugares a nivel internacional en aspectos negativos que no son más que la punta del iceberg de una sociedad en un estado de descomposición avanzado”.
México ocupa primeros lugares internacionales en corrupción, impunidad, producción y distribución de pornografía infantil, en abuso sexual infantil, acoso escolar, obesidad infantil, embarazos de adolescentes; por mencionar algunos de los más de 150 indicadores que se incluyen en la exposición de motivos de esta iniciativa.
“Si queremos un mejor país, necesitamos mejores ciudadanos; y el único lugar donde estos se forman y preparan es la familia”, concluyó Dabdoub Giacomán.
Hoy celebramos a...