Florence Foster Jenkins nos cuenta la historia de una soprano decididamente mala que contra todo pronóstico consiguió una notable notoriedad en el Nueva York de los años 30. Al parecer el público iba a verla porque se ría de lo lindo de lo mal que cantaba. Detrás de la cámara está el siempre interesante Stephen Frears y delante la siempre sorprendente Meryl Streep y un Hugh Grant por el que los años no pasan en balde. Promete.
ESTRENO: MAYO 2016