“Dios te quiere cuando eres débil”

Jesús Higueras es un sacerdote de la archidiócesis de Madrid, en España. Actualmente realiza su labor en Pozuelo, en la parroquia de Santa María de Caná, que se ha convertido en un referente por su gran actividad pastoral, especialmente con los jóvenes.

Ahora le llega una nueva encomienda. El papa Francisco le envía como Misionero de la Misericordia y en el programa radiofónico El Espejo de COPE explica cual será su labor y las características que tiene.

“El Papa lo que nos pide es fundamentalmente que seamos instrumento para que los obstáculos que pueda encontrar la gente en su camino para el abrazo con el Padre se quiten de en medio”, explica.

Para realizarlo se ha aprobado una medida especial, una gracia excepcional: “Darnos autoridad para perdonar pecados que actualmente estaban reservados a la Sede Apostólica, por su gravedad. Es un modo de llegar más lejos…”.

Jesús Higueras confiesa que se quedó “impresionado” cuando supo que el Papa le pedía este servicio y que también se mostró desconcertado: “Un sentimiento de gratitud al Señor porque se sirve precisamente de instrumentos muy débiles y muy torpes. Es bonito y a la vez te desconcierta”.

Es exagerado el denominarles los “curas de Ars del sigo XXI”: “No, no, ya quisiéramos… ojalá”, responde.

Pero muestra que es cosa del Señor, no hay un criterio claro de elección: “Dios escoge siempre a los más débiles del mundo para confundir a los fuertes del mundo. En todo caso es algo bonito, anunciar Dios al mundo y especialmente a la gente que está herida”.

Una labor que no es fácil, pero en la que Jesús Higueras tiene años de experiencia. Cuando llega alguien herido y con problemas les dice: “Dios te quiere cuando eres débil”, como la madre que quiere más al hijo más débil o al que está más confundido. Porque tú tienes esas heridas te quiere más el Señor.”

Asegura que no es fácil porque “hay gente que incluso culpabiliza a Dios y le sienta en el banquillo de los acusados. ¿Por qué si eres Padre y eres bueno has permitido que me pase esto? Nuestra respuesta es decir: “Mira, en la cruz Jesús asumió todo lo que tú estás sufriendo”. Mostrarles, en la medida de lo posible, el amor de Cristo que está en la cruz por ellos”.

Como en todo, la Misericordia de Dios se puede explicar con palabras, pero también con el testimonio. Para Jesús Higueras es muy importante: “Los sacerdotes somos personas que hemos experimentado, por nuestras propias heridas, esa Misericordia del Señor y  lo podemos testimoniar”.