La capital venezolana desplaza a la hondureña San Pedro de Sula como la capital más violenta de América Latina y el mundo durante 2015
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Caracas encabeza el ranking de ciudades más violentas con 119.87 homicidios por cada 100.000 habitantes, mientras que el segundo lugar lo ocupa la ciudad hondureña San Pedro de Sula (111.3).
Para la elaboración de este listado que publicó en México la ONG Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y la Justicia Penal se tomaron como referencia las urbes con más de 300.000 habitantes y de las 50 ciudades más violentas; 41 pertenecen a América Latina.
A San Salvador (El Salvador) correspondió la tercera posición, a Acapulco (México) la cuarta y a Maturín (Venezuela) la quinta, prosigue el informe.
Por otro lado, las ciudades de Venezuela en conjunto presentan el mayor nivel de violencia de la región.
Uno de los datos más significativos de este ranking es la cantidad de ciudades de América Latina que lo integran.
De las 50 ciudades del ranking, 21 se ubican en Brasil, 8 en Venezuela, 5 en México, 4 en Sudáfrica, 4 en Estados Unidos, 3 en Colombia y 2 en Honduras. Hay una ciudad de El Salvador, Guatemala y Jamaica. La abrumadora mayoría de las 50 ciudades más violentas del mundo se ubican en América Latina (41 urbes).
Otro de los países de América Latina que merece atención es Brasil, que tiene más ciudades violentas que Venezuela, aunque el nivel de violencia en urbes de más de 300.000 habitantes es mayor en el segundo.
Bocanada de aire
Por otro lado, hay algunas ciudades del continente que salieron del ranking en comparación con el mismo que se publicó en 2014 y de alguna manera representan un dato alentador.
Estas ocho ciudades que figuraron en el ranking 2014 y que salieron ahora son: Belo Horizonte (Brasil); Medellín y Cúcuta (Colombia); Chihuahua, Cuernavaca, Juárez, Nuevo Laredo y Torreón (México).
“A México corresponde el mayor número de ciudades que salieron del ranking (cinco), país que en 2011 llegó a tener 12 urbes”, según el informe.
En cuanto a esto, las salidas más relevantes corresponden a Juárez y Medellín. “La primera ocupó en forma consecutiva el liderato mundial entre 2008 y 2010. La segunda habría sido a inicios de los años noventa del siglo XX y durante toda la década, la ciudad más violenta del mundo si para entonces hubiera existido un ranking como este”, indica el informe.
La Iglesia, atenta
El crecimiento de los índices de violencia en América Latina es desde hace varios años un tema que la Iglesia católica a través de sus comunidades locales sigue de cerca y con preocupación.
En las últimas conferencias generales que se realizaron en la región el tema ya estaba instalado como uno de los más preocupantes. Por ejemplo, en la última (Aparecida 2007) se expresó lo siguiente:
“En muchos países se deteriora la vida social como consecuencia del crecimiento de la violencia, que se manifiesta en robos, asaltos, secuestros, y lo que es más grave, en asesinatos que cada día destruyen más vidas humanas y llenan de dolor a las familias y a la sociedad entera (DA 78)”.
En aquel momento también se advertía sobre el origen de la situación: “la idolatría del dinero, el avance de una ideología individualista y utilitarista, el irrespeto a la dignidad de cada persona, el deterioro del tejido social, la corrupción incluso en las fuerzas del orden, y la falta de políticas públicas de equidad social (DA 78)”.