La acción de Amal Clooney, la esposa de George Clooney, a favor del derrocado presidente de las Maldivas, revela lo que hay detrás de la postalMohamed Nasheed, presidente de Maldivas de 2008 a 2013, fue condenado a 13 años de prisión el 22 de febrero 2015 acusado de «terrorismo». Gracias a la presión internacional orquestada, sobre todo, por su abogada, la especializada en derechos humanos Amal Clooney, Nasheed podrá viajar a Reino Unido para ser operado de la espalda. El Gobierno de Maldivas quería conseguir un rehén a cambio, el hermano de Mohamed Nasheed, pero finalmente renuncia a ello.
Golpe de Estado
Los cinco años en el poder de Mohammed Nasheed estuvieron marcados por su exitosa campaña de comunicación en relación a lucha contra la crecida del nivel del mar que amenaza su archipiélago. Elegido durante las primeras elecciones multipartidistas del a historia de las Maldivas, derrotó a Maumoon Gayoom, instalado en el poder desde 1978, recibiendo así la simpatía de los medios de comunicación occidentales. Pero su aventura tocó a su fin en 2013, sin haber concluido su mandato presidencial, a causa de un motín de las fuerzas de seguridad apoyado por el partido islamista Adhaalath. El hermano de Maumoon Gayoom, Yameen Gayoom, asumió luego el poder tras unas elecciones anticipadas y controvertidas.
La reacción europea
En el mes de noviembre de 2015, la diputada francesa Michèle Rivasi propuso una resolución para pedir a las agencias de viajes que retiraran de sus catálogos a las Maldivas. El motivo, las violaciones de los derechos democráticos, tras la desaparición sin explicación del periodista Ahmed Rilwan en 2014, a día de hoy ya dado por muerto. Esta resolución prevé sanciones económicas que, de ser aplicadas, recaerían sobre las Maldivas. El turismo representa una fuente económica vital para el país y el 44% de los turistas que recibe son europeos.
Invierno islamista en la playa
El fracaso de Mohammed Nasheed es debido al predominio de un islam radical en las Maldivas. Al margen de los turistas, que viven separados de la población del archipiélago, los maldivos viven sujetos a la estricta aplicación de la sharía, la ley islámica. El islam es la única religión reconocida en el país; las minorías, entre las que está un minúsculo cristianismo, viven en la clandestinidad. Llevar el velo es obligatorio y el consumo de alcohol está prohibido. El día de la destitución de Mohammed Nasheed, un grupo de activistas destrozó las representaciones en piedra caliza y coral de Buda del Museo Nacional.
Un mal profundo…
Por desgracia, el islam radical instalado en el archipiélago es un mal que sobrepasa el problema puntual de la personalidad del actual presidente, Yameen Gayoom. Las persecuciones religiosas no cesaron durante el mandato presidencial de Mohammed