Ninguno de los candidatos habla de sus convicciones religiosasEsta semana una entrevista me ha gustado especialmente. Jorge Fernández Díaz, ministro del Interior hablaba en La Vanguardia de lo humano y lo divino. Hablaba de su religiosidad, de como es de misa diaria, de cómo le gusta la Teología de la Historia y sobre como le pedía cosas a su Ángel de la Guarda. Muy Valiente el Ministro del Interior.
En las redes sociales se montó la polémica y algunos graciosos han querido mofarse del ministro por sus convicciones religiosas. Es alucinante…hoy en día uno puede decir cualquier cosa excepto hablar…por ejemplo de su Ángel de la Guarda.
Jorge Fernández Díaz ha sido muy valiente y esa misma valentía le pediría a los cuatro candidatos principales: hablen de religión, atrévanse…
Ninguno ha dicho nada sobre religión. No hablo de Acuerdos Iglesia-Estado o asignatura de religión…hablo de algo más profundo. ¿Como son sus convicciones religiosas?
Sabemos casi de todo de los candidatos…los hemos visto cocinar, conducir…nos han hablado de su familia, de sus amigos, del deporte, de sus hobbies…pero ninguno, ninguno ha hablado de religión. ¿Nuestros candidatos rezan? ¿Creen en Dios, en la libertad, en la energía o en un Ser superior? ¿Tienen en cuenta la trascendencia?
Algunos pensarán que esto es una barbaridad, pero NO… Por ejemplo, en Estados Unidos sus candidatos y políticos hablan abiertamente de sus convicciones religiosas. Y no pasa nada…nadie se ríe de ellos en las Redes Sociales…
Quiero saber las convicciones religiosas de Mariano Rajoy, de Pedro Sánchez, de Albert Rivera y de Pablo Iglesias…
No es lo mismo un Presidente que piense que existe algo superior, que existe Dios, que un Presidente que piense en que no hay nada más superior a él.
No es lo mismo un Presidente que sepa lo que es la Misericordia, el Perdón, la Caridad, la Solidaridad, la Verdad…a un Presidente que pase olímpicamente de los valores cristianos y que considere que lo más importante para él son las mayorías.
Echo mucho en falta este aspecto en la campaña electoral en España. Nadie hablar de Dios, nadie habla de sus convicciones, nadie habla de religión.