La ONU ha tomado el 9 de diciembre como el Día Internacional contra la Corrupción. En este 2015 el lema es “¡Rompe las cadenas de la corrupción!” y la idea es crear conciencia para combatir esta lacra que ahonda la crisis de muchos países, y que deja en la pobreza a millones de familias en el mundo.
Política, social y económica
Para la ONU, “la corrupción es un complejo fenómeno social, político y económico, que afecta a todos los países.” En este sentido, es una larva que se ha metido en todos lados de la vida económica, social, política.
“Por ejemplo, socava las instituciones democráticas al distorsionar los procesos electorales, pervertir el imperio de la ley y crear atolladeros burocráticos, cuya única razón de ser es la de solicitar sobornos”, dice la carátula de la campaña internacional conjunta 2015.
En ese mismo orden de ideas, para la ONU, la corrupción “también atrofia los cimientos del desarrollo económico, ya que desalienta la inversión extranjera directa y a las pequeñas empresas nacionales les resulta a menudo imposible superar los «gastos iniciales» requeridos por la corrupción.”
Este año, el interés de la ONU se centra en mostrar cómo la corrupción socava la democracia y el estado de derecho, lleva a violaciones de los derechos humanos, distorsiona los mercados, erosiona la calidad de vida y permite que prosperen el crimen organizado, el terrorismo y otras amenazas a la seguridad humana.
También subraya que la corrupción “es un delito transversal, que afecta a muchas áreas. Además, pone de evidencia que actuar contra la corrupción es fundamental para lograr los Objetivos de Desarrollo Sostenible, que tienen por fin erradicar la pobreza, proteger el planeta y asegurar la prosperidad para todos.”
Los abismos de Dinamarca a Somalia o Corea del Norte
En su vigésima edición (en 2014) el Índice de Percepción de la Corrupción de la organización Transparencia Internacional arrojó que, de 175 países examinados, los países menos corruptos (del primero al quinto lugar) fueron Dinamarca, Nueva Zelanda, Finlandia, Suecia y Noruega. Mientras que en la escala contraria, los más corruptos fueron Somalia (el último de la lista), Corea del Norte (empatado con Somalia), Sudán, Afganistán y Sudán del Sur.
La diferencia en puntos (donde 100 es el menos corrupto y 0 el más corrupto) entre Dinamarca (92 puntos) y Somalia-Corea del Norte (8 puntos) hace recordar la enorme brecha que existe entre países desarrollados y países pobres en el mundo. Y la necesidad de que los desarrollados apoyen a los países pobres a salir del círculo vicioso de la corrupción y el subdesarrollo.
“El Índice de Percepción de la Corrupción 2014 pone de manifiesto que, cuando líderes y altos funcionarios abusan de su poder para usar fondos públicos en beneficio propio, el crecimiento económico se ve minado y los esfuerzos por frenar la corrupción quedan frustrados”, señaló José Ugaz, presidente de Transparencia Internacional.
“Los funcionarios corruptos desvían activos de origen dudoso a otras jurisdicciones usando compañías offshore con total impunidad”, añadió Ugaz. “Los países en las posiciones inferiores deben adoptar medidas drásticas contra la corrupción y a favor de su población. Los países en las mejores posiciones del índice deberían asegurarse de no exportar prácticas corruptas a países en desarrollo”, terminó diciendo el dirigente de esta organización.