Ha registrado desde el 2010 los índices de homicidios más altos del mundo sobre los que existen registrosAmérica Latina enfrenta una crisis de violencia inusitada. Y el impacto en la economía de los países azotados por el narcotráfico y el pandillerismo, es brutal. Una frase resume el asunto: 8 de cada 10 países con más homicidios en el planeta están en la región.
Y de todos los países del mundo, Honduras es el que el que acapara el mayor número de ellos: 90.4 asesinatos por cada 100 mil habitantes (seguido de Venezuela con 53.7 e Islas Vírgenes con 52.6).
Gasto inútil, asesinatos crecientes
Por este motivo, es absolutamente lógico que la crisis económica que padece Honduras no tenga fin. El gasto en armamento y policía, por un lado, y por el otro el asesinato sistemático de los jóvenes hondureños por el crimen organizado han hecho perder décadas del Producto Interno Bruto a esta nación centroamericana. Provocando, también, lo que el relator de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Chaloca Beyani, acaba de llamar como una “epidemia” de desplazamiento interno y externo de población.
Esta “epidemia” de desplazamientos –muchos de los cuales, la mayoría, nutren las filas de los migrantes hondureños a México y Estados Unidos—es el resultado de las amenazas, intimidaciones, asesinatos, extorsión, violaciones de mujeres y niños y un ambiente de miedo e inseguridad como resultado de las actividades de las pandillas, según alertó Beyani.
“Aunque las causas son muy diferentes a las que resultan de los conflictos o desastres observados en otros países, el impacto en la vida de los afectados no es menos catastrófico”, se puede leer en el informe del relator de la ONU, tras una visita al país centroamericano.
Las medidas del gobierno, en pañales
En esta visita, Beyani corroboró las cifras gubernamentales que marca en 170,000 el número de desplazados internos, aunque podrían ser muchos más pues existe una “falta de datos integrales incluso acerca del lugar donde se ubica la población desplazada, sus necesidades y problemas de protección”.
“Las medidas por parte del gobierno aún están en pañales”, subrayó el informe de Beyani quien señaló que las pandillas han tomado el control efectivo de algunos barrios y colonias de Tegucigalpa, la capital, y San Pedro Sula, la segunda ciudad más poblada del país.
Añadió que tales pandillas operan “casi con absoluta impunidad” y que el sistema de justicia no está cumpliendo su papel. Según el Ministerio Público, hondureño, el índice de impunidad supera 90 por ciento de los crímenes cometidos, lo cual hace que miles de familias tengan que huir a otro sitio en el interior del propio país, y los que tienen algunos recursos, quemar las naves y buscar fortuna en Norteamérica, corriendo todos los riesgos imaginables.
Solo superados por países en guerra
Finalmente, de acuerdo con datos de Naciones Unidas, Honduras ha registrado desde el 2010 los índices de homicidios más altos del mundo sobre los que existen registros, situándose en índices de entre 65 y 91 homicidios por cada 100,000 habitantes, cifras sólo superadas por países en guerra abierta. Es también el segundo país más pobre de América, tras Haití.