Obras abandonadas, contratos de último momento…Faltaban días para las elecciones generales en la Argentina, y una toma de tierras privadas por miles de familias, para instalar su propia vivienda, tomó por sorpresa a la opinión pública argentina. Tuvo lugar en el partido bonoaerense de Merlo, y el nuevo intendente de esa localidad, Gustavo Menéndez, responsabilizó al intendente saliente, Raúl Otaceché, quien rechazó tal acusación. Independientemente de responsabilidades, la toma desnuda la precariedad de la situación en la que miles de familias viven, y han puesto en alerta a los vecinos.
En ese contexto, el obispo de Merlo-Moreno monseñor Fernando Maletti aseguró que “la comunidad católica de Merlo-Moreno no puede permanecer ajena ante estos hechos que ponen en riesgo la paz de la comunidad y constituyen un grito de alerta en torno a las condiciones de vida de los pobres y el uso de la tierra en el conurbano”.
El Obispo fue enfático al señalar que “no se deben avalar las usurpaciones de cualquier tipo. Son derechos que se violan, y por tanto no tienen legalidad”, a la vez que señaló que ven “con preocupación que las autoridades salientes se despreocupen del problema pero también notamos que las que van a asumir no han reaccionado con fuerza suficiente, lo que lleva al desconcierto de los ciudadanos”.
Monseñor Maletti advirtió además de la utilización de la precariedad de la población, y advirtió que dicha manipulación no le cabe solo al político: “También hemos visto cómo se han aprovechado de esa situación algunos movimientos sociales y políticos quienes han elevado las legítimas banderas de la violación de los derechos para lograr posicionarse en el espacio público, pero sin un interés genuino en resolver de manera justa los conflictos que se suscitan”.
Obras abandonadas y contratos de último momento
Otro fenómeno ocurrido en torno al fin del ciclo electoral involucra la conclusión de obras iniciadas meses antes de las elecciones. Ocurre en José C Paz, donde las obras de repavimentación de la estratégica ruta 197 están absolutamente paralizadas desde el día que se conoce el nombre del nuevo intendente. Tan paralizadas están, sin máquinas o trabajadores a la visa, que los mismos vecinos han desplazado parte de los mojones que impedían la circulación para desplazarse por una de las principales arterias de tránsito del Gran Buenos Aires. En ese caso, como en el de Merlo-Moreno, el intendente entrante pertenece al mismo partido que el intendente saliente.
Además, según se denuncia en distintos medios de información, en algunas intendencias se están firmando contrataciones de último momento para que personas o empresas sobrevivan al cambio de mando.
En el marco de las transiciones en gran parte del país, el gobernador saliente de la Provincia de Buenos Aires y ex candidato a presidente Daniel Scioli, y la gobernadora entrante, María Eugenia Vidal, mantuvieron una cordial reunión de transición en la que conversaron sobre varios temas, entre estos, quién se hace cargo de los salarios de los empleados públicos hasta cuándo, otro tema que preocupa en las transiciones. Su cordial diálogo y comunicación conjunta con la prensa se asemeja a la cordialidad en las transiciones en países vecinos como Chile y Uruguay.
Sería provechoso para la Argentina que esa cordial transición se repita en todos los niveles. Porque en el medio de las pujas, los que más sufren no son los dirigentes salientes u entrantes. Es la población, que está pendientes de sus decisiones, como ocurre en Merlo.