La Eucaristía es el perdón y el camino a la solidaridad con los demás, recuerda el Papa en un mensaje a un congreso eucarístico en la IndiaEl Papa Francisco envió este jueves 12 de noviembre un vídeo mensaje al Congreso Eucarístico que se celebra en Mumbai, India, en el que participan 700 delegados de todo el país. En el mensaje, apuntó que la Eucaristía “es el perdón, es el viático que nos ayuda a andar, a caminar”.
Respecto al sacramento de la Iglesia que celebra el misterio de Jesús, en la última cena de su vida, el Papa explicó que este “actualiza el pacto que nos santifica, nos purifica y nos une en la maravillosa comunión con Dios”.
Pan para los débiles de espíritu
Así, continuó: “aprendemos que la Eucaristía no sólo es una recompensa para los buenos, sino también la fortaleza para los débiles y pecadores. Es el perdón y el sustento que nos ayuda en nuestro camino”.
“Hoy todos los seres humanos del mundo necesitan alimento”. Por ello, insistió que el hambre no es solo física sino también espiritual.
“Hay otras hambres de amor, de inmortalidad de la vida, de afecto, de ser cuidado, de perdón, de misericordia”, agregó.
Jesús dona su sangre para el perdón
Este hambre puede saciarla –confirmó- sólo el pan que viene de las alturas. De ahí que se refiriera a la Eucaristía como el sacramento por el que se celebra y actualiza el ministerio pascual de Jesús como un “Pan vivo que da la vida al mundo”.
El cuerpo de Jesús ofrecido “por nosotros en la cruz, su sangre derramada para el perdón de los pecados de la humanidad se hace disponible para nosotros en el pan y el vino de la Eucaristía que se transforma en la consagración”, añadió
Pero sin solidaridad no hay verdadera Eucaristía
Asimismo evidenció que la “Eucaristía no termina con la participación en el pan y la sangre del Señor”.
De esta manera, insistió que este sacramento “nos lleva a la solidaridad con los demás. La comunión con el Señor es necesariamente una comunión con nuestros hermanos y hermanas”.
Alegría para compartir en las tinieblas
Y, por tanto, “el que se nutre del cuerpo y la sangre de Cristo no puede permanecer impasible cuando ve que sus hermanos sufren la miseria y el hambre”, constató.
El Pontífice recordó su exhortación La alegría del Evangelio para indicar que los cristianos que reciben la Eucaristía “estamos llamados a llevar esperanza a los que viven en las tinieblas y en la desesperación”.
La Eucaristía es un sacramento que recuerda la última cena de Jesús, que en vez de celebrar la antigua pascua judía, se entregó a sí mismo, transformando de antemano su condena de muerte en un sacrificio voluntario para la salvación del mundo. Etimológicamente significa una oración de acción de gracias.