La Cuaresma está llegando a su fin.
No olvides a Aleteia en tu ofrenda cuaresmal
para que brille la esperanza cristiana.
¡Apoya a Aleteia!
Tras la destitución del presidente Otto Pérez Molina por los escándalos de corrupción en los que se vio implicado, y las protestas populares que se han sucedido en Guatemala en los últimos meses, las elecciones generales que se realizaron en su primera vuelta, arrojaron sorpresas que bien podrían marcar el derrotero que seguirán los demás países de Centroamérica.
Según los datos del Centro de Cómputo del Tribunal Superior Electoral (TSE) de Guatemala, con 19 mil 582 mesas escrutadas (98.04%), Jimmy Morales, candidato del Frente de Convergencia Nacional (FCN-Nación), sumó un millón 158 mil 753 votos (23.91%).
El segundo lugar lo disputan Sandra Torres, ex primera dama y abanderada del partido Unidad Nacional de la Esperanza (UNE, socialdemócrata) que obtuvo 19.64% de los sufragios, y Manuel Baldizón, dirigente del populista partido Libertad Democrática Renovada (Lider), que logró 19.60% de los votos.
En la elección participaron 5 millones 336 mil 728 electores (70.62% del padrón), y de los votos contabilizados, 222 mil 928 (4.18%) son nulos, y 267 mil 964 (5.02%) fueron emitidos en blanco.
El candidato puntero en esta primera vuelta electoral, Jimmy Morales, afirmó que no hará alianzas de cara a la segunda vuelta el 24 de octubre. Dijo no preocuparle quién dispute con él la segunda vuelta pues tiene fe en que se llevará la victoria.
Morales ha sido calificado por la prensa como “la gran sorpresa en Latinoamérica”. Sin ningún pasado político, llega a ocupar el primer sitio en la primera vuelta electoral empujado por la revolución cívica que ha derribado al presidente Pérez Molina y le ha quitado, también, el fuero, para ser juzgado por corrupción, cosa inusitada en los países de la región.
Se trata de un típico candidato coyuntural, por su postura contra el sistema, y por su carisma popular. Morales es un teólogo evangelista, un cómico y economista de 46 años que ha llegado hasta aquí –él mismo lo ha reconocido—con un alto porcentaje de voto de castigo contra los otros partidos. “Eso me lleva a comprometerme y a tratar de no defraudar a esos votantes”, ha dicho en su primera entrevista, tras saberse ganador en la primera vuelta electoral de Guatemala.