Después de Bagdad, funcionarios corruptos permiten nuevos expolios
En la ciudad de Kirkuk y en la provincia iraquí de la que es capital, numerosos terrenos y casas pertenecientes a cristianos están siendo sustraídos ilegalmente a sus legítimos propietarios gracias a la producción de documentos legales falsos que hacen de hecho imposible su recuperación por estos últimos.
Los mismos hechos habían sido denunciados ya en el pasado en Bagdad. Aquí ha sido posible gracias a la complicidad de funcionarios corruptos y deshonestos que se ponen al servicio de impostores y de grupos organizados de estafadores.
En un caso reciente, informa la web iraquí ankawa.com, un grupo de viviendas pertenecientes a ciudadanos cristianos que habían salido temporalmente de la ciudad, fue destruido y se construyó un parking en su lugar.
El robo “legalizado” de propiedades de familias cristianas está estrechamente ligado al éxodo masivo de cristianos iraquíes que siguió a las intervenciones militares lideradas por los Estados Unidos para poner fin al régimen de Saddam Hussein.
Los estafadores se apropian de casas y de inmuebles vacíos, dando por hecho que ninguno de los propietarios volverá a reclamar la propiedad.
Parlamentarios y asociaciones cristianas han hecho un llamamiento a las instituciones administrativas locales pidiendo que finalicen este fenómeno de falsas certificaciones sobre el que se basa este tipo de estafa.