"Somos ricos en lo que importa, el conocimiento, la cultura y la fe", respondió Adriana Almanza a las polémicas declaraciones sobre los migrantes mexicanos en EEUU
"Él no bebe. No se droga. Desde luego que no es un criminal, violador o un narcotraficante, como usted sugirió en su discurso". "Mi padre ha trabajado 5-6 días a la semana desde que era un niño y nunca le he oído quejarse ni una vez". Ni su retórica ni los 9.000 millones de fortuna personal que tiene Donald Trump intimidaron a Adriana Almanza, que dirigió al magnate una carta abierta para presentarle a su padre, Raúl, un inmigrante mexicano que llegó hace más de tres décadas a Estados Unidos.
"No somos ricos en la riqueza, señor. Pero somos ricos en lo que importa, el conocimiento, la cultura y la fe", escribió Adriana en su misiva, que en dos días se compartió 122.000 veces en Facebook y recibió 240.000 "me gusta".
"Nunca he sido una persona que se muerda la lengua y se guarde lo que piensa", cuenta la joven a BBC Mundo, aunque reconoce que jamás pensó que su respuesta fuera a tener tanto impacto.
Aspirante presidencial
Todo vino después de que Trump, en el discurso en el que anunció su candidatura a las primarias del partido republicano para las presidenciales de 2016, abogara por un "gran muro" en la frontera sur de México, del que dijo, "no es un amigo".
"México manda a su gente, pero no manda lo mejor. Está enviando a gente con un montón de problemas (…). Están trayendo drogas, el crimen, a los violadores. Asumo que hay algunos que son buenos", afirmó también el magnate.
Ante estas afirmaciones Adriana no pudo permanecer impasible. "Estaba pensando en mi gente. En mi papá, en mis tíos, mis primos, mis amigos, y todos los inmigrantes, los latinos, especialmente los mexicanos".
Adriana asegura que está muy orgullosa de sus raíces y "no voy a permitir que personas como él hablen así de mi gente. Para mí, mi papá es todo un héroe, él es mi mundo, ha sacrificado mucho y ha sufrido mucho". "Nadie puede decir que él no es ‘lo mejor de México’".
Y así se lo hizo saber al magnate en su misiva.
La carta
"Me gustaría tomarme un minuto para presentarle a mi padre, Raúl Almanza. Uno de los muchos que México "envía" a este país, como usted tan elocuentemente lo pone", dice la joven de 28 años.
"No es ningún secreto que llegó aquí indocumentado, sin autorización, o "ilegal", tal como usted los llama", escribe la joven, que explica cómo buscó empleo en el campo en varios estados para enviar dinero a sus padres y a sus 9 hermanos a México.
"Señor Trump, en su discurso afirmó que México no envía a EE.UU. a los mejores. Pero me permito disentir. Si mi padre representa al tipo de personas que México "envía", no hay duda de que este país es cada vez mejor. El problema es que usted y yo tenemos una definición diferente de ‘los mejores’".
Los mejores
"Los mejores, para mí, son los que trabajan duro y siguen siendo humildes. Eso es exactamente lo que encarna mi padre; eso es exactamente lo que los otros millones de mexicanos encarnan".
Raúl Almanza "no tiene lo que se llama una ‘educación formal’", pero la joven recuerda cómo su padre le ayudaba con las tareas escolares de niña y le inculcó la importancia de la educación y de lograr un título, a pesar de que él no tenía uno.
Adriana es licenciada en Relaciones Internacionales por la Universidad Valley State University y tiene una maestría en educación.
"Quizás debería conocer a más gente como mi padre; hay millones como él. Entonces, lo vería por usted mismo y en lugar de atacar México agradecería a México enviarnos a los ‘mejores’".
La joven asegura que quiso hacerlo de la manera más respetuosa posible, por eso dejó pasar unos días antes de escribir su respuesta.
"No se puede educar cuando no puedes controlar tu rabia. Eso suele llevar a más división y odio", reconoció.