El jefe del gobierno polaco da luz verde para acoger en un primer momento a 60 familias de cristianos sirios refugiados
Una ayuda modesta pero significativa: de las 300 familias originarias de Siria para las que la ONG Estera está pidiendo ayuda, el gobierno polaco ha anunciado que se hará cargo de 60, en un primer momento.
“Acogeremos para empezar a 60 familias. Debemos preparar un calendario de actuación preciso”, aclaró el jefe del gobierno polaco, Ewa Kopacz, tras una reunión con su gabinete.
“En estos momentos, los cristianos que son perseguidos de manera bárbara en Siria merecen que un país cristiano como Polonia actúe rápidamente y salga en su ayuda”, consideró.
La presidenta del consejo de ministros no pidió ninguna condición a esta mano tendida: “Queremos que estas personas encuentren condiciones de vida dignas, que tengan la posibilidad de aprender polaco y de cuidar de sus hijos”.
El país se encuentra actualmente con un importante problema demográfico a causa de que centenares de miles de jóvenes polacos han emigrado, en particular a Inglaterra, estas últimas décadas.
El sistema de pensiones apenas puede encargarse de la población envejecida. Según un periodista de RFI, sobre esta base la Unión Europea espera convencer a Polonia para que acoja inmigrantes de África del Norte. El estado eslavo continúa oponiéndose a ello, como la mayor parte de los países de su región.
Frente a la repartición obligatoria de los inmigrantes por cuotas, y a cambio de dinero, emprendida por la Comisión europea el mes pasado, Varsovia opta en cambio por una acogida, limitada ciertamente, pero totalmente voluntaria.