La Cuaresma está llegando a su fin.
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"El problema no es quitar a los niños de los puestos de venta sino en ofrecer una posibilidad a estos niños que viven estas situaciones de pobreza".
A veces me pongo a pensar en la cantidad de tiempo que desperdiciamos. Y lo perdemos irremediablemente aún pudiendo recibir educación, aspirar a grandes metas, ir más allá de nuestras limitaciones. Por eso, creo que es necesario caer en la cuenta de lo valioso es todo lo que recibimos diariamente y de lo que a veces, por descuido o indiferencia, dejamos escapar.
Artículo originalmente publicado por Fundamentos para la vida