Una guía para rezar con la Escritura esta Cuaresma
LECTIO DIVINA LUNES IV SEMANA DE CUARESMA CICLO B |
Invocación al Espíritu Santo:
Ven Espíritu Santo,
Ven a nuestra vida, a nuestros corazones, a nuestras conciencias.
Mueve nuestra inteligencia y nuestra voluntad
para entender lo que el Padre quiere decirnos a través de su Hijo Jesús, el Cristo.
Que tu Palabra llegue a toda nuestra vida y se haga vida en nosotros.
Amén
TEXTO BIBLICO: Juan 4, 43-54 "Si no ven signos y prodigios, ustedes no creen" |
4,43: Pasados los dos días se trasladó de allí a Galilea. 4,44: Jesús mismo había declarado que un profeta no recibe honores en su patria. 4,45: Cuando llegó a Galilea, los galileos lo recibieron bien porque habían visto todo lo que hizo en Jerusalén durante las fiestas; ya que también ellos habían estado allá.
4,46: Fue de nuevo a Caná de Galilea, donde había convertido el agua en vino. Había allí un funcionario real cuyo hijo estaba enfermo en Cafarnaún. 4,47: Al oír que Jesús había llegado de Judea a Galilea, fue a visitarlo y le suplicaba que bajase a sanar a su hijo moribundo.
4,48: Jesús le dijo:
—Si no ven signos y prodigios, ustedes no creen.
4,49: Le dice el funcionario real:
—Señor, baja antes de que muera mi muchacho.
4,50: Jesús le dice:
—Regresa tranquilo, que tu hijo sigue vivo.
El hombre creyó lo que le decía Jesús y se puso en camino. 4,51: Iba ya bajando, cuando sus sirvientes le salieron al encuentro para anunciarle que su muchacho estaba sano.4,52: Les preguntó a qué hora se había puesto bien, y le dijeron que el día anterior a la una se le había pasado la fiebre. 4,53: Comprobó el padre que era la hora en que Jesús le había dicho que su hijo seguía vivo. Y creyó en él con toda su familia.
4,54: Ésta fue la segunda señal que hizo Jesús cuando se trasladó de Judea a Galilea.
BIBLIA DE NUESTRO PUEBLO
LECTURA: ¿Qué dice el texto? |
Jesús volvió a Galilea, allí había dicho que ningún profeta es bien acogido en su tierra, pero esta vez fue recibido de mejor forma, debido al conocimiento que los galileos tuvieron sobre lo que hacia y decía Jesús en Jerusalén.
Se dirige a Caná de Galilea, un lugar importante en la vida publica de Jesús, allí obró el primer signo. Un funcionario del Rey, se acerca a Jesús y le suplica que bajase a sanar a su hijo moribundo. Lo que pide el funcionario real, es la presencia física de Jesús, junto a su hijo, para de esta forma ser sanado.
La respuesta de Jesús es contundente, “si no ven signos y prodigios, ustedes no creen”. Para Jesús la fe es creer firmemente en aquello que se pide, creer en su palabra.
El funcionario real vuelve a insistir, “Señor, baja antes de que mi hijo muera”. Y Jesús responde, “baja, que tu hijo vive”. Jesús no cumple con la petición que realiza el funcionario, de bajar a donde estaba su hijo, sino que pone a prueba su Fe, es decir el creer en su palabra. De esto se trata la fe, es creer en la Palabra del Señor, nos dice la Escritura, que el funcionario “creyó y volvió a casa”, esta es la clave.
El funcionario comprueba que su hijo sanó a la hora de su encuentro con el Señor, de esta forma confirmo su Fe. Este encuentro vivencial del funcionario con el Señor, permitió a otros creer, su familia tambien “Creyó”, de esto se trata la vida cristiana, del encuentro transformador con el Señor, que viene a nuestra vida para aumentar nuestra fe, y para sanarnos.
MEDITACION: ¿Qué me dice a mí el texto? |
Nos preguntamos para profundizar en nuestra vida estas palabras de Salvación:
- ¿Recuerdo aquel encuentro con el Señor que cambio mi vida? ¿Cuándo fue? ¿Qué sentí en ese momento? ¿Al redescubrir mi primer encuentro con Cristo, quiero repetir esa experiencia revitalizadora todos los días? ¿Cómo hacerlo posible?
- La Palabra de Jesús bastó para que el funcionario creyera, ¿También yo al leer la Palabra, y al orar creo con la convicción de que Dios me habla y escucha? ¿Me cuesta creer sin ver signos o “señales”?
- ¿Mi encuentro con el Señor, me lleva a que otros también se encuentren y lo conozcan? Él creyó, y su familia también ¿Tengo en cuenta que mi testimonio de vida es muy importante, tanto dentro de mi familia, como fuera de ella? ¿Me cuesta hacerlo?
ORACION: ¿Qué le digo yo al Señor? |
Orar, es responderle al Señor que nos habla primero.
- Gracias Señor por salir a mi encuentro, y darme nueva vida.
- Señor que pueda ser testimonio coherente en la vida, de fe y caridad.
- Hacemos un momento de silencio y reflexión para responder al Señor. Añadimos unas intenciones de oración.
CONTEMPLACION: ¿Cómo interiorizo el texto? |
Para el momento de la contemplación podemos repetir varias veces este versículo del texto para que vaya entrando a nuestra vida, a nuestro corazón:
"Si no ven signos y prodigios, ustedes no creen" (Versículo 48)
Y de esta forma nos ponemos en contemplación.
ACCION: ¿A qué me comprometo? |
Debe haber un cambio notable en mi vida. Si no cambio, entonces, pues no soy un verdadero cristiano.
Mi agradecimiento por creer en Jesús, se manifiesta con llevar la alegría cristiana a los demás. Que los demás puedan conocer también a Cristo por mi alegría y testimonio de encuentro con Cristo.
Por el Hno. Ricardo Grzona, frp y Cristian Buiani