Una guía para rezar con la Escritura esta Cuaresma
LECTIO DIVINA JUEVES II SEMANA DE CUARESMA CICLO B |
Invocación al Espíritu Santo:
Ven Espíritu Santo,
Vamos a abrir la Biblia, Tú eres el autor.
Queremos que nos abras nuestra mente cerrada, nuestro corazón preocupado en otras cosas,
Y nos lleves al encuentro con Jesús, a través de su Palabra y de la oración.
Que tu Palabra llegue a toda nuestra vida y se haga vida en nosotros.
Amén.
TEXTO BIBLICO: Lucas 16, 19-31 «Hijo, recuerda que en vida recibiste bienes » |
16,19: Había un hombre rico, que vestía de púrpura y lino y todos los días hacía espléndidos banquetes. 16,20: Echado a la puerta del rico había un pobre cubierto de llagas llamado Lázaro, 16,21: que ansiaba saciarse con lo que caía de la mesa del rico; y hasta los perros iban a lamerle las heridas.
16,22: Murió el pobre y los ángeles lo llevaron junto a Abrahán. Murió también el rico y lo sepultaron.
16,23: Estando en el lugar de los muertos, en medio de tormentos, alzó la vista y divisó a Abrahán y a Lázaro a su lado.
16,24: Lo llamó y le dijo:
—Padre Abrahán, ten piedad de mí y envía a Lázaro, para que moje la punta del dedo en agua y me refresque la lengua; pues me torturan estas llamas.
16,25: Respondió Abrahán:
—Hijo, recuerda que en vida recibiste bienes y Lázaro por su parte desgracias. Ahora él es consolado y tú atormentado. 16,26: Además, entre ustedes y nosotros se abre un inmenso abismo; de modo que, aunque se quiera, no se puede atravesar desde aquí hasta ustedes ni pasar desde allí hasta nosotros.
16,27: Insistió el rico:
—Entonces, por favor, envíalo a casa de mi padre, 16,28: donde tengo cinco hermanos; que les advierta no sea que también ellos vengan a parar a este lugar de tormentos.
16,29: Le dice Abrahán:
—Tienen a Moisés y los profetas: que los escuchen.
16,30: Respondió:
—No, padre Abrahán; si un muerto los visita, se arrepentirán.
16,31: Le dijo:
—Si no escuchan a Moisés ni a los profetas, aunque un muerto resucite, no le harán caso.
BIBLIA DE NUESTRO PUEBLO
LECTURA: ¿Qué dice el texto? |
La lectura de hoy nos presenta a dos hombres, uno rico y el otro pobre. El pobre tiene nombre propio: Lázaro, pero el hombre rico no es presentado por su nombre, es como si fuera un desconocido para Dios. A pesar de las diferencias en sus condiciones de vida, uno afortunado y el otro excluido, corrieron la misma suerte, ambos murieron.
Lo que acontece después de la muerte de estos dos hombres, nos permite conocer mejor las realidades escatológicas. Si el rico permanece en el lugar de los muertos, nos hace pensar que el lugar donde está Lázaro es un lugar de vivos, es decir, un lugar de resurrección y vida. El hombre rico, que con la muerte perdió su riqueza, estando en el lugar de los muertos alzo la vista, es decir, que había una realidad superior, el Reino de los Cielos, en el que ve a Abraham y a Lázaro.
El pedido del hombre rico, es de piedad, para que se compadezcan de él, pide aliviar su tormento. Abraham le recuerda los bienes que recibió en vida, que no supo valorar para reconocer a Dios por medio de ellos, y servir a sus hermanos. La muerte se presenta como la ultima palabra, ante ella lo que se hizo, o se dejo de hacer no tiene remiendo. Cuando se termina la vida, se terminan las posibilidades de cambio. Abraham destaca el abismo que los separa, el destino de cada uno es irreversible; según algunas interpretaciones, este abismo sería el purgatorio, realidad transitoria de purificación para llegar al Reino.
El hombre rico a pesar de estar ya condenado, se preocupa por los suyos, y pide que vaya Lázaro a advertirles de que pueden correr la misma suerte que él. La respuesta de Abrahán es categórica, Dios envió a los profetas para advertir a los hombres, y llamarlos a la conversión, hasta el mismo se hizo hombre; Jesús, culmen de toda la revelación divina, no podemos esperar otra mas que esta.