La Iglesia visitará a los jóvenes detenidos por el gobierno de Maduro y recluidos en las celdas del Sebin
“La Tumba” es el nombre que lleva una reducida celda de máxima seguridad implementada por el Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (SEBIN), con el único fin de torturar psicológica y físicamente a tres jóvenes estudiantes universitarios, opositores al gobierno de Nicolás Maduro: Lorent Saleh, Gerardo Carrero y Gabriel Valles.
Los dos primeros fueron extraditados desde Colombia en septiembre de 2014 y acusados de presuntos “actos terroristas”, entre otros delitos; el tercero, detenido en el campamento de protestas frente al PNUD en Caracas, en mayo de ese año.
Los padres de los jóvenes, en nombre de sus hijos, señalaron, mediante un comunicado que fue divulgado este 7 de febrero, el injusto cautiverio y las violaciones de sus derechos humanos, así como el inicio de una huelga de hambre que los muchachos emprendieron en las instalaciones del SEBIN, en Plaza Venezuela, Caracas.
“Unidad del pueblo venezolano; libertad para todos los secuestrados políticos; cese de las torturas y vejámenes contra estudiantes; pronunciamientos de la Unión Europea; respeto al debido proceso de todos los presos comunes; cierre definitivo de La Tumba y la eliminación del aislamiento celular, nombre atribuido a la tortura psicológica a la que somos sometidos”, son algunas de sus peticiones.
¿Qué es La Tumba?
Denuncian la singular forma de tortura que reciben, denominada “La Tumba”. No es la tradicional violencia, sin embargo no deja de ser un tormento psicológico que veja al ser humano tanto como las golpizas, choques eléctricos en las partes íntimas y ahogamientos en cubos de agua o bolsas plásticas que otros presos han denunciado como prácticas recurrentes e intimidatorias del gobierno de Nicolás Maduro.
“El solo nombre de LA TUMBA, deja en evidencia muchas cosas”, relatan los jóvenes en el comunicado. “Estos calabozos se encuentran bajo tierra, específicamente en un sótano 5, en la sede principal del SEBIN (…); constan de un pequeño pasillo y un baño con cámara en cada extremo, además de cámaras y micrófonos dentro de las celdas, por donde nos monitorean las 24 horas del día”, precisan.
“Entre nosotros mismo casi nunca nos podemos ver la cara, ya que nos mantienen encerrados en celdas individuales y sólo nos abren para ir al baño una persona a la vez, nos toca comer a cada quién en el piso de nuestras celdas, la soledad es tan grande y el silencio tan absoluto (…); sólo escuchamos los vagones del metro que se desplazan por encima de los calabozos, es tan fuerte el frío al cual nos someten que nos produce daños en la piel; de tanto pedirles, subieron un poco la temperatura.
Joel García, abogado de Saleh y Valles confirmó que no les han tocado, “pero no ven la luz del sol, están en un sótano, no les permiten leer, comen en el suelo, están encerrados en celdas de paredes blancas con luz blanca las 24 horas del día. No saben cuándo es el día y cuándo es la noche. Sólo pueden hacer una llamada de 5 minutos por semana a un familiar”, dijo. “Eso es tortura psicológica”, reiteró.
El chantaje y la coacción son otros elementos que se suman a estos maltratos psicólogos. García denunció supuestos ofrecimientos de parte de la Fiscalía: “La fiscal Katerine Harrinton les ha ofrecido mejores condiciones si dicen que Ledezma (Antonio), Machado (María Corina) o López (Lepoldo) conspiran con ellos”.
Los jóvenes que promueven la organización llamada “Operación Libertad” explican en su comunicado que las oraciones les han ayudado a mantenerse activos. “Los ejercicios que hacemos dentro de las celdas y las oraciones son las herramientas diarias que utilizamos para mantenernos de pie y firme antes las adversidades
”.
Iglesia enviará emisario
El cardenal Jorge Urosa Savino calificó de infrahumanas las condiciones de reclusión de los tres jóvenes y se comprometió a enviar un emisario: “Lamentablemente no puedo ir a visitarlos ahora, pero en nombre mío ira uno de los obispos auxiliares en los próximos días”, reporta el diario El Nacional, citando un llamado en Twitter hecho por la señora Yamilet Saleh, pidiendo la intervención de la Iglesia.
“Con todo respeto, cardenal Jorge Urosa, le pido, como madre, que visite a los jóvenes del SEBIN de Plaza Venezuela. Se declararon en huelga de hambre”, escribió la madre de Lorent.
El arzobispo de Caracas, quien se encuentra en Roma, en trabajo con algunas comisiones cardenalicias, se refirió concretamente a los detenidos en el campamento del PNUD: “Hay gran cantidad de jóvenes detenidos desde el año pasado que deberían gozar de libertad plena. Esos muchachos detenidos en el PNUD por ejemplo, no estaban cometiendo ningún delito, todos deberían estar libres”.
De igual manera, el purpurado consideró peligroso que el gobierno mantenga “medidas policíacas de presión” contra la ciudadanía. Y citó la detención temporal del presidente de la asociación de clínicas privadas, Carlos Rosales, por informar sobre la escasez de insumos para ese sector. “¡Todos sabemos que hay escasez!”, dijo.
Finalmente, el primado de Venezuela hizo un llamado “a la sensatez del gobierno para que dejen de estar ejecutando acciones intimidatorias. Lo que tienen que resolver es el problema real de la escasez”, indicó.