Aniversario del Hospicio de San José en Guatemala
Guatemala ha visto despegar, en los últimos años, la epidemia de VIH / SIDA no sólo en el número absoluto de personas afectadas sino en grupos poblacionales específicos, particularmente en mujeres y niños.
El impacto de este crecimiento en los menores de edad y entre las mujeres ha tomado por sorpresa a la sociedad guatemalteca, pues se trata de un impacto inesperado y desconocido pero que provoca sufrimiento, exclusión social y estigmas públicos a los pequeños y las mujeres que han sido contagiadas.
El Hospicio San José, que cumple 30 años de existir, fue fundado en Guatemala en 1985 por el padre Francis O’leary y desde entonces continúa con su labor de brindar atención integral a niños, adolescentes y adultos que viven con VIH/Sida y enfermedades comunes. En 1994 obtuvo la acreditación legal como Asociación Hospicio de San José.
Esta institución inició a prestar servicios en la Ciudad de Guatemala, posteriormente a los seis años se trasladó al municipio de San Lucas Sacatepéquez, donde se ubicó por espacio de 12 años y con el aporte de bienhechores, en la actualidad se dispone de instalaciones propias, que se encuentran en el kilómetro 28.5 carretera a Bárcenas, municipio de Santa Lucía Milpas Altas, Sacatepéquez.
Aunque el Hospicio trata de dar atención integral a niños, adolescentes y adultos que viven con VIH/Sida en Guatemala, lo cierto es que está dedicado en cuerpo y alma a los menores.
Los servicios que brinda el Hospicio de San José se logran a través del aporte gubernamental, donaciones de bienhechores, empresas privadas y organismos internacionales. Y la población que atiende son niños y jóvenes internos con VIH/Sida; niños internos en exposición; niños internos negativos en adopción, pacientes con VIH/Sida, pacientes en exposición a VIH/Sida y Negativos y accidentes no laborales (violaciones).
Con el objetivo de brindar atención integral a niños huérfanos que viven permanentemente en las instalaciones del Hospicio, así como prestar atención a pacientes externos a nivel nacional contagiados con el VIH o Sida y de dar atención de salud integral en general a nivel nacional a personas de escasos recursos, el Hospicio de San José es ya en Guatemala una institución líder a nivel nacional en diagnóstico y tratamiento a personas con VIH o Sida, especialmente de menores de edad.
La misión del fundador, el padre Francis O’leary (un sacerdote católico inglés, nacido en 1931 y fallecido en el año 2000) de contribuir a reducir el impacto de la pandemia a través de atención integral, información, educación y prevención dirigido a población vulnerable y en general, se ha ido cumpliendo en estas tres décadas de trabajo, cuenta hoy con 67 internos y más de 700 pacientes ambulatorios, a los que se les da seguimiento.
Desde luego, son muchas las necesidades de este Hospicio, que forma parte de la St Joseph’s Hospice Association, una asociación internacional de hospicios fundada por el padre O`Leary conocida como “Jospice”, mismas que se pueden atender y consultar en http://www.hospiciosanjose.org/