Identificado el primero de los 43 normalistas desaparecidos en Iguala, asesinado y tirado a un basurero
Finalmente, lo que se temía sobre el destino de los 43 normalistas de la escuela de Ayotzinapa desaparecidos la noche del 26 de septiembre en la ciudad de Iguala (Guerrero) empieza a ser cierto: fueron asesinados y sus restos tirados en un basurero de la vecina población de Cocula.
Este fin de semana Felipe de la Cruz, vocero de los padres de los normalistas de Ayotzinapa, confirmó que peritos argentinos les revelaron que algunos restos hallados en el basurero de Cocula, pertenecen a Alexander Mora Venancio, uno de los estudiantes desaparecidos.
Los mismo ha confirmado la Procuraduría General de la República (PGR) que es la encargada de llevar al frente la investigación de este caso que ha puesto en un punto muerto la tarea de reformas emprendidas por el presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, quien acaba de llegar a su segundo año de mandato con uno de los más bajos porcentajes de aceptación por parte de la ciudadanía (apenas 39 por ciento aceptan su gestión).
Que mi muerte no sea en vano
Fuentes cercanas a la Escuela Normal Rural “Raúl Isidro Burgos” de Ayotzinapa, a la que pertenecían los 43 normalistas desaparecidos, dieron a conocer el hecho y le notificaron a los familiares de Alexander el hallazgo de sus restos. De hecho, el día de ayer En la comunidad de El Pericón, Tecoanapa, en el mismo Estado de Guerrero, Alexander fue velado y recordado por sus familiares.
Alexander Mora, un joven campesino al que sus compañeros apodaban "La Roca" por su determinación, se convierte, así, en la primera de las 43 tragedias que se van a ir revelando conforme los forenses argentinos y el instituto austriaco al que la PGR hizo llegar los restos calcinados encontrados en el basurero de Cocula para su reconocimiento.
De Alexander, se dice que "era un compañero fuerte, muy perseverante en lo que se proponía", según el líder estudiantil Omar García, quien calificó su muerte como "una pérdida muy grande". Sus padres estuvieron acompañados el sábado por miembros de la comunidad escolar en su localidad de El Pericón, en la zona de la Costa Chica.
Por su parte, los padres de familia de los otros normalistas desaparecidos y, muy seguramente muertos, dijeron que no se van a quedar a llorar la muerte del estudiante reconocido por los forenses argentinos y que su movimiento mantendrá la exigencia de encontrar con vida a los otros 42 normalistas.
En la página de Facebook Ayotzinapa Gro. Escuela Normal Rural “Raúl Isidro Burgos” escribieron: “Hoy 6 de diciembre le confirmaron los peritos Argentinos a mi padre que uno de los fragmentos de mis huesos encontrados me corresponden. Me siento orgulloso de ustedes, que han levantado mi voz, el coraje y mi espíritu libertario. No dejen a mi padre solo con mi pesar, para él significo prácticamente todo, la esperanza, el orgullo, su esfuerzo, su trabajo y su dignidad. Te invito a que redobles tu lucha. Que mi muerte no sea en vano”.