La ONG ayudará a los refugiados de Erbil y su entorno a pasar el invierno en buenas condiciones
Desde el 7 de agosto, el avance de los yihadistas de la organización terrorista Estado Islámico en la llanura de Nínive ha obligado a unas 120.000 personas a huir de sus localidades (Qaraqosh, Karamless, Bartalla, Ba’ashiqa, Tellkeff y Tellskof principalemente) para refugiarse en la región autónoma del Kurdistán iraquí.
Durante el verano, han soportado los fuertes calores en tiendas de campaña de campos improvisados. Ahora temen el invierno.
¿Cuáles son las necesidades?
Entre octubre y mediados de diciembre, las temperaturas caen poco a poco y llueve ocasionalmente. Diciembre, enero y febrero son los meses más fríos. El termómetro se acerca a los 0 grados en el norte de Irak.
Sin embargo, los desplazados de la llanura de Nínive huyeron de sus casas en pleno mes de agosto cargando solamente algo de ropa de verano a sus espaldas. No están preparados, por tanto, para pasar el invierno.
Para ayudarlos, la ONG Fraternidad en Irak (Fraternité en Irak) lanza la operación “Invierno en Nínive”, dirigida en primer lugar a proporcionar ropa de abrigo a los refugiados empezando por los niños.
Si los donativos exceden a las necesidades, los fondos se usarán para financiar soluciones de realojamiento.
¿Cómo se desarrollará “Invierno en Nínive”?
Las autoridades religiosas estiman que unos 18.000 niños están actualmente refugiados en el barrio cristiano de Erbil y en los pueblos de los alrededores.
Para proporcionar abrigos a cada uno, Fraternidad en Irak necesita reunir 90.000 euros.
La ONG ya ha negociado en el mercado local la adquisición de una gran cantidad de parkas a 7 dólares cada una. Fraternidad en Irak distribuirá la ropa en Irak con la ayuda de una asociación caritativa de Qaraqosh, con la que colabora desde 2012, y de la Iglesia iraquí.
¿Cuál es el calendario?
Cuatro semanas para reunir 90.000 euros. El 9 de noviembre Fraternidad en Irak pone en marcha la distribución de ropa de invierno para los niños.
Gracias a los donativos, Fraternidad en Irak ha podido actuar para que esta crisis humanitaria no se convierta en una crisis sanitaria y apoyar a los refugiados en la urgencia del verano.
Desde mediados de agosto ha enviado unas diez toneladas de medicamentos y de suplementos alimenticios, ha financiado una ambulancia y ha organizado actividades para los niños.
Fraternidad en Irak agradece la colaboración y el apoyo aportado, así como los donativos para el invierno.