Encuentro de las pastorales de movilidad humana en México
En los albores del XV Encuentro Nacional de la Pastoral de la Movilidad Humana, en Mérida, Yucatán, bajo el lema “Migrantes hacia un mundo mejor: identidad del agente de pastoral”, el padre Arturo Montelongo Mercado, secretario ejecutivo de la Dimensión Episcopal de la Pastoral de la Movilidad Humana (DEPMH) de la Conferencia del Episcopado Mexicano, habló con el periódico El Observador Online sobre los alcances y objetivos de esta reunión, así como las situaciones más acuciantes del fenómeno migratorio y los desafíos que le plantea a la Iglesia católica en México.
Los mismos sueños y los mismos rezagos
México es el principal país expulsor de migrantes de América Latina y uno de los más activos en este tema en el mundo. Anualmente, cerca de medio millón de mexicanos pasan a los Estados Unidos, y la frontera de tres mil kilómetros que comparten estos dos países es la más transitada del planeta, con alrededor de 300 mil cruces diarios. Esto hace que la situación migratoria de los connacionales sea un tema de primera necesidad a ser debatido, lo mismo que los 250 mil migrantes centroamericanos que pasan por territorio mexicano de camino a Estados Unidos.
Para el padre Montelongo Mercado “la migración en México sigue estando vigente como una expresión de la necesidad de tanta gente que busca poder emprender el camino a una vida mejor, con mayor calidad, aunque en principio corra los riesgos de afrontar los peligros que el proceso de migración lleva consigo”. Lo mismos sueños y las mismas esperanzas son compartidas por mexicanos y centroamericanos; ambos “se arriesgan a sufrir las mismas peripecias, aunque, en relación a los migrantes centroamericanos tendríamos que decir que es aún mayor su calvario porque también tienen que cruzar y sufrir las peripecias de nuestro territorio mexicano”.
En cuanto a los temas más urgentes a atender, el sacerdote encargado de movilidad humana de la DEPMH dijo que son, ante todo, la salvaguarda de los derechos humanos de los migrantes, sea cual sea su nacionalidad, sexo o edad. Para el padre Montelongo Mercado “la DEPMH trabaja en comunión con las 60 casas para migrantes que se encuentran a lo largo y ancho del territorio nacional, en promover y desarrollas los procesos de integración y formación de la defensa de los derechos humanos de los migrantes y de aquellos que los asisten en estos lugares de caridad sin fronteras, asistiendo humana y cristianamente a los hermanos más necesitados que son los migrantes que libre y voluntariamente llegan a nuestras casas”.
Hacia una espiritualidad de comunión
El Encuentro Nacional de Pastoral de la Movilidad Humana que se celebrará del 16 al 19 de septiembre en Mérida, tiene “un sentido trascendental” en lo que se refiere al proceso de formación permanente de los agentes de pastoral que se encargan de asistir en las diferentes sub-vertientes de la movilidad humana como son la pastoral del mar, de turismo, de los itinerantes, de los migrantes y refugiados. Así mismo el Encuentro “sirve también para compartir experiencias de trabajo y dar continuidad a los procesos de animación y participación de los agentes de la movilidad humana en todo el país y generar mayores beneficios para los hermanos que se encuentran en tránsito”, según dijo el sacerdote mexicano.
El objetivo de este encuentro –de acuerdo con los organizadores–es construir el perfil y la misión del agente de pastoral de la movilidad humana para desarrollar posteriormente un directorio de la materia en México, “partiendo del análisis de la realidad, iluminados por la Sagrada Escritura y el Magisterio de la Iglesia”. El tema del encuentro es “Migrantes hacia un mundo mejor” y busca consolidar el trabajo pastoral basado en la espiritualidad de la comunión “que nos lleve a crear un directorio de acciones concretas que faciliten la tarea de asistir puntalmente a los hermanos que estando en movilidad, requieren de nuestros servicios”, dijo el secretario ejecutivo de la DEPMH.