Uno de los padres de la psiquiatría moderna alerta: “Demasiada medicina puede ser mala para tu salud”
Allen Frances, es uno de los padres de la psiquiatría moderna, director durante años del Manual Diagnóstico y Estadístico (DSM), el libro de referencia de la psiquiatría mundial. Ahora reniega de la deriva que está tomando el tratamiento de muchas enfermedades y apunta con firmeza a las farmacéuticas como responsables.
¿Qué es normal? “Cuando un país como España experimenta unos problemas económicos, forma parte de la condición humana que la gente se sienta triste, preocupada, que tenga incertidumbre acerca de su futuro. Esto no es un trastorno mental”, explica Frances para quien hay un culpable claro. “Las farmacéuticas se han gastado miles de millones de dólares en intentar convencer a médicos, pacientes, padres y profesores de que los problemas de la vida diaria son trastornos mentales debidos a un desequilibrio químico fácil de diagnosticar. Han vendido la enfermedad psiquiátrica como una manera de vender pastillas”.
En su opinión, estos problemas de la vida diaria responden mejor con el paso del tiempo, la resistencia humana, el apoyo de amigos y de la familia, la reducción del estrés o la psicoterapia. “Estos problemas son malinterpretados como trastorno psiquiátrico por los propios médicos de atención primaria después de haber visto al paciente durante siete minutos, sin conocerles de nada, sin saber nada de psiquiatría, muy influenciados por los comerciales de las farmacéuticas y bajo la presión del propio paciente”. Además señala, “la manera mas fácil de que el paciente se vaya es darle una pastilla". Fácil, aclara "a corto plazo pero a menudo dañino e innecesario a más tiempo vista".
Es el caso del proceso de duelo. “Somos mamíferos, amamos, y tenemos ataduras. El precio del amor es sentir un duelo muy profundo cuando perdemos a un ser querido. Es algo normal no solo para los humanos sino también para delfines, elefantes, chimpancés e incluso loros. No deberíamos esperar eliminarlo con una solución superficial como puede ser una pastilla ya que reduce la dignidad del amor del ser humano”.
Asegura que tan solo un 5% de la población padece una enfermedad psiquiátrica grave. “Hay millones de personas que no tienen un trastorno psiquiátrico real, a las que se etiqueta erróneamente y se les trata en exceso. Es malo para ellos y para ese 5% que realmente necesita el tratamiento porque no reciben el suficiente cuidado, ni apoyo social”.
En esta línea, Allen Frances ha llamado la atención a los padres sobre la importancia de proteger a sus hijos del sobrediagnóstico y del sobretratamiento. “La tendencia actual es apresurarse a diagnosticar a los niños”, señala.
Por otro lado, los más pequeños también son los mas difíciles de diagnosticar. “Cambian de mes a mes, responden mucho a los agentes de estrés externos y tienen diferentes tasas de desarrollo. Si eres el niño más pequeño de tu clase la probabilidad de que se te diagnostique con un Síndrome de Déficit de Atención es el doble que si eres el mayor. Convertimos la inmadurez normal en un trastorno mental”. Por eso advierte del riesgo de tratar a los niños con pastillas “que no necesitan" y de las que se desconocen "los efectos a largo plazo", en especial "en un cerebro tan joven”.
¿Solución? “La mejor protección en contra de la medicina comercial es un consumidor informado”,afirma el psiquiatra. También advierte sobre la necesidad de ejercer un control sobre la industria farmacéutica. “Tienen un poder enorme sobre los políticos y una gran riqueza para difundir información engañosa”. Si embargo, explica “las grandes empresas de tabaco estaban en la misma situación de poder hace 25 años y cuando pudimos frenar su publicidad, fuimos capaces de domarles. Tiene que haber un cambio en el comportamiento de los médicos, en la expectativa del paciente y lo mas importante; frenar el marketing de las empresas farmacéuticas y empezar a hacer marketing del mensaje contrario: Demasiada medicina puede ser mala para tu salud”.