El Pontífice expresó al rabino jefe de Roma su apoyo espiritual a la familia de los jóvenes encontrados sin vidaEl rabino jefe de la comunidad judía de Roma se sorprendió de escuchar del otro lado del teléfono la voz del Papa. «Deseo manifestarle personalmente mi dolor por la muerte de los tres jóvenes».
La llamada llegó pocas horas después de la noticia del asesinato de los jóvenes israelíes desaparecidos: Eyal Yifrah (19 años) Gilad Shaar (16 años) y Naftali Fraenkel (16 años) secuestrados el pasado 12 de junio mientras pedían un pasaje gratis en automóvil, “autostop”, en Cisjordania.
El rabino jefe de Roma reconstruyó la conversación con el Papa en la páginas del periódico italiano, Il Messaggero. «Inicialmente, escuchando la voz […]pensé que era una broma» afirmó. «La llamada tiene como fondo una audiencia programada hace seis días en el Vaticano concedida a las familias de los jóvenes, entonces desaparecidos. Los parientes de las víctimas llegarían desde Israel» para ver al Papa. «Lamentablemente los hechos han tomado otra dirección: los muchachos no están más entre nosotros».
Al respecto, el padre Federico Lombardi ha manifestado este miércoles que el rabino Di Segni había hablado con el Papa antes de la noticia trágica de la muerte de los adolecentes para que los familiares vinieran al Vaticano. No obstante, el portavoz confirmó que ante el dolor de las familias hablar de una visita al Papa ahora no es oportuno.
El Papa Francisco, que visitó en mayo el Oriente Medio, compartió el "terrible dolor" de las familias de las víctimas, dijo el director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede ayer en un comunicado.
La violencia es obstáculo para la paz
La noticia “es terrible y dramática” declaró Lombardi. Además, señaló que es “un crimen execrable e inaceptable y representa un obstáculo gravísimo en el camino hacia esa paz por la que, incansablemente, tenemos que seguir comprometiéndonos y rezando”.
“La violencia llama a otra violencia y alimenta el círculo mortal del odio. El Papa Francisco se une al dolor inenarrable de las familias golpeadas por esta violencia homicida y al dolor de todas las personas afectadas por las consecuencias del odio y pide a Dios que inspire a todos pensamientos de comprensión y de paz’’ concluyó.
La muerte violenta de los adolescentes ha suscitado la indignación a nivel internacional. El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon emitió una condena ante este "crimen atroz" al tiempo que exhortó a las partes "a abstenerse de emprender acciones que pudieran agravar aún más esta situación, de por sí ya muy tensa”.