Él con discapacidad física, ella camarera, ambos analfabetos: ¿cómo pudieron escribir los mensajes en inglés?
Nuevas condenas a muerte por blasfemia y nuevas batallas legales afectan otra vez a la comunidad cristiana en Pakistán: una pareja cristiana, él con discapacidad física, ella camarera, ambos analfabetos, han sido condenados a muerte este 4 de abril por presunta “blasfemia por sms”. Ambos fueron arrestados en Gojra en julio de 2013.
La sentencia – que llega poco después de la de Sawan Masih – ha generado confusión y amargura en la comunidad cristiana, mientras que los abogados ya han anunciado que apelarán contra la sentencia.
El padre Aloysius Roy, superior de la provincia paquistaní de los Misioneros Oblatos de María Inmaculada (OMI), comenta a Fides: “Estamos seriamente preocupados. Casos como estos son frecuentes y causan un gran sufrimiento. Seguimos orando, mientras que el problema sigue sin resolverse”.
“Manifestamos nuestra solidaridad con los acusados, pero los cristianos se mantienen con un perfil bajo, porque la vida está llena de dificultades y peligros, y para nosotros el primer mandamiento es sobrevivir –añade-. Los cristianos tienen miedo y se mueven con extrema precaución” .
Los OMI llevan en Pakistán un total de 10 parroquias en 4 diócesis, y “los retos a los que se enfrentan los cristianos son sobre todo las injusticias que les golpean todos los días”.
El superior continúa: “Del Gobierno esperamos el respeto a la ley, el estado de derecho y la libertad de culto, prevista en la Constitución”.
Según Farrukh Saif, director de la ONG World Vision in Progress (WVIP), los condenados, Shafqat Emmanuel, que es discapacitado, y su esposa, Shagufta Kausar, están acusados por un tribunal de Toba Tek Singh por enviar mensajes de texto blasfemos.
Ambos tienen cuatro hijos menores de edad, de los que ahora se encarga la organización no gubernamental WVIP.
Según lo informado a la agencia Fides, la evidencia de la inocencia de la pareja es muy clara: la tarjeta SIM de donde fueron enviados los mensajes no está registrada a nombre de las víctimas. Y no hay ninguna evidencia de que ellos fueron los que los enviaron.
Además, son analfabetos, no podrían escribir y enviar los mensajes en inglés, como estaban escritos los mensajes blasfemos. Los abogados han anunciado el recurso ante el Tribunal Supremo.
(En la imagen, la pareja de los condenados a muerte con uno de sus cuatro hijos)