Nueva evangelización, servir a los pobres y libertad religiosa, prioridades de los obispos estadounidenses
El nuevo presidente de la Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos (USCCB, por sus siglas en inglés), el arzobispo de Louisville, monseñor Joseph E. Kurtz, ha establecido, en una entrevista concedida al semanario Our Sunday Visitor (OSV) el camino a seguir por la Conferencia
Tambi{en, monseñor Kurtz ha reiterado sus puntos de vista sobre el catolicismo en la Unión Americana, así como el papel de la figura del Papa Francisco en la recomposición del panorama católico en ese país y de la propia conferencia de obispos del tercer país con mayor cantidad de católicos en el mundo.
Las tres prioridades
Por principio de cuentas, el arzobispo Kurtz estableció las prioridades de su gestión al frente de la USCCB por los próximos tres años. La primera de ellas es trabajar en la nueva evangelización en la que los obispos estadounidenses “tienen como gran modelo al Papa Francisco”.
La segunda prioridad es servir a los más pobres y vulnerables de la sociedad en Estados Unidos. Para el presidente de la USCCB “esto involucra a la dignidad de toda persona humana, desde el momento de la concepción hasta la muerte”, pero también “envuelve los esfuerzos que estamos haciendo para apoyar a los inmigrantes y sus familias” y los trabajos conjuntos para “sacar de la pobreza” a quienes están viviendo dentro de ella.
La tercera prioridad marcada por la presidencia actual de la USCCB en manos del arzobispo Kurtz, tiene que ver, directamente, con el “ser capaces de cultivar (en Estados Unidos) una robusta libertad religiosa” que bien puede resumirse –según el prelado en su entrevista con OSV—“básicamente diciendo que la fe (católica) es un servicio a la vida pública” del país.
“Nuestra fe no va en detrimento de la vida pública, más bien es necesaria para la vida pública”, dijo monseñor Kurtz a OSV. Y agregó: “Podemos ver cómo, en nuestra historia, la fe ha hecho buenos ciudadanos y nos ha vuelto sensibles al bien común”.
Más adelante, remarcó que “tenemos que estar seguros –como el Papa Francisco dice—que defendiendo la libertad religiosa podemos hacer que la Palabra de Dios sea anunciada y vivida en su integridad”.
El “efecto Francisco” al interior de la USCCB
A la pregunta sobre el “efecto” que está teniendo la predicación y el testimonio del Papa Francisco en la Conferencia de los obispos estadounidenses, su presidente dijo que el Papa ha hecho que la misericordia de Dios toque las vidas de todos.
El Pontífice ve a la persona antes que la norma, pero eso no quiere decir que vaya a cambiarlo todo: “no está esperando para renovar las enseñanzas ancestrales de la Iglesia, sino que está buscando nuevas estrategias para ponerlas al día”, dijo el arzobispo Kurtz.
“Una de las cosas que ha dicho el Papa Francisco –y estoy muy agradecido por ello—es que él realmente quiere ejercer una robusta colegialidad; quiere escuchar e involucrar a la participación de otros en su responsabilidad de Vicario de Cristo en la tierra, y nosotros debemos de estar atentos a lo que eso significa”.
En este sentido, ha sido muy importante –para el presidente de la USCCB—tanto el debate previo como el cuestionario que se ha realizado sobre el próximo sínodo de la familia. “Para el Papa el sínodo no significa investigar cambios en la enseñanza de la Iglesia, sino encontrar caminos creativos en la estrategia pastoral”.
“Creo –resumió el arzobispo Kurtz—que todo está en la palabra creativo (…) La nueva evangelización no es tanto lo se dice, sino lo que se escucha y qué es los que se recibe. Así que, imagino, el foco del sínodo será aquello que los delegados deliberen en este asunto: ¿cómo están siendo recibidas por la gente las enseñanzas de la Iglesia y cómo pueden las personas mantener viva su fe en Cristo?”.
La entrevista fue realizada por Gretchen R. Crowe, editora de la edición semanal de OSV.