La Patrona de Costa Rica será venerada en la iglesia de Santa Ana (Vaticano)

A una mujer costarricense, Floribeth Mora Díaz, le cupo el honor de ser recipiendaria del milagro que catapultó al Papa Juan Pablo II a la santidad, misma que será proclamada por la Iglesia, junto con el Papa Juan XXIII el próximo domingo 27 de abril, Domingo de la Misericordia.

Este honor ha conmovido a Costa Rica, y a América Latina en su conjunto.  Por tal motivo, en todo el continente y en especial en el pequeño país centroamericano, se realizarán muchas actividades para celebrar la canonización del Papa viajero.

Uno de ellos, quizá el más significativo para la feligresía costarricense será el que una réplica de la imagen de la Virgen de los Ángeles, patrona de Costa Rica, mejor conocida como “La Negrita”, será colocada en la iglesia parroquial de Santa Ana, en la Cuidad del Vaticano, la parroquia-frontera, fundada en 1378, y que hace límite entre Roma y Ciudad del Vaticano.

“La Negrita” podrá aumentar el número de peregrinos

En Santa Ana fue, justamente, donde cuatro días después de ser electo el Papa Francisco celebró su primera Misa dominical y sorprendió a los guardias suizos –mismos que la custodian—y al público en general al salir y saludar de mano a la gente que pasaba cerca de ahí.  Se trata de una Iglesia preferida por los peregrinos por lo que “La Negrita” podrá aumentar su número.

Su colocación y develación tendrá el sábado 26 de abril a las 9 de la mañana hora de Roma y el acto será presidido por el cardenal Italiano Angelo Comastri, quien es el Arcipreste de la Basílica de San Pedro.  Luego, dará inició una celebración eucarística presidida por el propio cardenal y concelebrada por los obispos costarricenses José Rafael Quirós, José Francisco Ulloa y  Hugo Barrantes.

En declaraciones al periódico católico de Costa Rica Eco Católico, el embajador costarricense ante la Santa Sede, Fernando Felipe Sánchez Campos, explicó que la petición se hizo durante la visita que hiciera la Presidente Laura Chinchilla a Su Santidad el Papa Francisco, en noviembre pasado.

"Le dije que aprovecháramos su reunión con el Papa para que nos concediera la gracia de ubicar la imagen de la Virgen en los jardines del Vaticano, y ella expresó que no sabía cómo iba reaccionar el Papa, pero que bien valía el esfuerzo y el atrevimiento. Concluida la audiencia papal, la presidente salió sonriente y dijo, el Papa dijo que sí".

Sin embargo, para que se lograra el cometido, se necesitó el apoyo de las autoridades eclesiásticas, específicamente de la Conferencia Episcopal de Costa Rica, órgano que dio su visto bueno a través de una petición firmada y dirigida al gobernador del Vaticano. Igualmente, la petición de la primera mandataria de Costa Rica, Laura Chinchilla, fue llevada personal y formalmente por el embajador Sánchez Campos a las autoridades vaticanas.

Excelentes relaciones con El Vaticano

De hecho, la réplica de la Virgen se encuentra desde octubre del 2011 en Roma. Fue llevada por monseñor José Rafael Quirós, entonces obispo de Limón y actual arzobispo de San José, junto al sacerdote Jorge Eddy Solórzano, para ese tiempo rector de la Basílica de los Ángeles, y el orfebre encargado del resplandor de la imagen original.

Ellos la colocaron en la embajada de Costa Rica en el Vaticano. Fue la misma que bendijo Su Santidad Benedicto XVI, quien resaltó su belleza.  En principio la imagen se pensó para que se colocara en los jardines del Vaticano, sin embargo su composición la hace frágil a los condiciones del tiempo, por lo que se pondrá para su veneración en unos de los altares laterales de la Iglesia Pontificia de Santa Ana.

"Estará en una urna construida por la fábrica de San Pedro, y se colocará en una base de mármol que ya estaba en el lugar, pues la  imagen cuenta con enchapes de oro y plata, no es apta para exteriores siquiera con una gruta, pues nos la arruinaría la humedad".

La réplica será la única con la que contará el Vaticano de la Patrona de Costa Rica. En palabras del embajador, "esto es muy significativo, un gran regalo para el pueblo de Costa Rica" que “refleja un excelente momento que viven las relaciones entre la Santa Sede y Costa Rica y  denota el apoyo y estima que se le tiene al país en el Vaticano".

Finalmente, Sánchez Campos mencionó su esperanza de que la Iglesia de Santa Ana se convierta en “un nuevo punto de peregrinación para todos los ticos que visitan Roma, estamos muy satisfechos con este logro".