La bendición de los cadáveres, los hijos que están bien, la invitación a refugiarse en el exterior. El sacerdote de Leopoli (Ucraina) cuenta un nuevo día en el caos de Kiev.“Ya estamos en guerra. Pero mi lugar es aquí, cerca de mi pueblo”.
Padre Michajlo Dymyd.
Falta poco para hacer una oración sobre los cuerpos». Padre Michajlo Dymyd, sacerdote griego católico de Leopoli, lleva la estola y el casco militar verde.
Tampoco él tiene claro lo que sucedió esta mañana, cuando la tregua emitida ayer por la noche por las partes en conflicto fue violada.
Incluso hoy en día, nadie entiende quien haya atacado primero, pero el hecho es que los berkut, las fuerzas especiales de la policía rodearon la plaza ayer, esta mañana han retrocedido por vía Instytutska.
Los rebeldes los habían perseguido, pero varios de ellos han sido heridos de bala por los francotiradores. Primero cinco, luego veinte. Las fuentes no oficiales hablan de 42 bajas por parte de los manifestantes. El Ministerio del Interior habla de víctimas por arma de fuego, incluso también por parte de la policía.
«¿Qué está sucediendo? Lo que muchos esperaban. El Estado está actuando de manera ilegal. Hoy ya no tenemos dudas, estamos ante una dictadura. ¿Cómo terminará todo esto? No lo sé». Padre Dymyd recuerda el llamamiento conjunto por la paz de las Iglesias de Ucrania y, en particular, el llamado del arzobispo católico de Kiev, Svjatoslav Ševcuk que afirma, entre otras cosas, que «quien tiene el poder, tiene la responsabilidad de lo que está sucediendo en el país». ¿Yanukovic escuchará a quien le pide de regresar a la mesa de negociación? «Parece que se volvió sordo, él y el sistema que se ha creado en torno a sí mismo». A Kiev llegaron los ministros de Relaciones de Exteriores de Francia, Alemania y Polonia. Angela Merkel llamó por teléfono al presidente.«¿Se puede confiar de Yanukovic? Nosotros confiamos solo en Dios».
El hijo de dieciocho años de padre Michajlo (sacerdote de rito greco) está reclutado en las “fuerzas de autodefensa de la Maidan", como es llamada por los manifestantes, y durante 48 horas estaba desaparecido. «Esta mañana me llamó, está con mi otra hija en el Hotel Ucrania. Están bien, pero me pidieron que me fuera del país y pidiera refugio en el extranjero. Pero yo me quedo aquí. Yo les dije que ellos pueden hacer lo que quieran, pero mi lugar está aquí. Tengo en mi bolsillo un billete de tren para Leopoli, que he comprado antes de venir aquí. Es para mañana. Pero hoy han suspendido todas las conexiones ferroviarias. Podría encontrar otra manera de volver. Pero aquí estamos en una guerra y mi pueblo necesita de sacerdotes. La oración en este tiempo es lo más importante».
Antes de regresar a la Plaza Maidan, esta mañana padre Michajlo ha escrito su sermón cotidiano que ha publicado en Facebook.«Hoy escribí que tenemos que orar por los francotiradores que disparan contra la gente. Tenemos que orar para que ellos recuperen la libertad de Dios. Esta libertad es dada por el Señor, si ellos van a aceptar este don, se difundirá también entre los demás. Esta es la razón más importante por la cuál debemos orar hoy».
Artículo publicado originalmente en: Tracce.it
Hoy celebramos a...