El equilibrio geopolítico entre EEUU, China y Corea del Norte explicado por un experto, los puntos claves del informe de la ONU y el testimonio del único sacerdote católico en el país
Corea del Norte es “consciente de muchos crímenes contra la humanidad” según la ONU. Aleteia.org ha entrevistado a Giorgio Cuscito, experto de geopolítica en Asia y colaborador de la revista italiana especializada en política internacional, Limes. Sobre la situación de los católicos y la libertad religiosa el padre Gerald Hammond, único sacerdote católico que puede visitar Corea del Norte, afirma que a través del testimonio se puede evangelizar saltando los rígidos controles oficiales.
La ONU acusa a Corea del Norte de violaciones sistemáticas
El documento de 372 páginas de la ONU habla de prisioneros políticos. Pyongyang niega la existencia de cárceles secretas y torturas.
El Informe presentado por el presidente de la Comisión de investigación de la ONU y difundido en Ginebra el pasado lunes es taxativo: el gobierno de Corea del Norte es consciente de muchos crímenes contra la humanidad a través de “violaciones sistemáticas, difusas y graves”.
En este caso, China tiene un papel importante dado que es el mejor aliado de Corea del Norte, como confirma Giorgio Cuscito debido a que “es su principal defensor ante las criticas de la Comunidad Internacional. Un ejemplo lo hemos visto el año pasado cuando aumentó la tensión entre Pyongyang y Seúl debido a las pruebas nucleares realizadas por la primera”.
El informe de la ONU habla de crímenes contra la Humanidad
El documento recoge los testimonios de alrededor de 320 personas, entre ellas prisioneros políticos, de quienes el régimen de Pyongyang niega la existencia pero las imágenes satelitales prueban la existencia-actividad de las cárceles que les privan de la libertad.
La Comisión de la ONU, en este sentido, “no ha podido controlar directamente (las prisiones) porque le ha sido negado el acceso al país, por ende el documento es basado en varios testimonios recopilados de manera privada para evitar eventuales represalias” asegura Cuscito.
Además, “la Comisión ha pedido a las Naciones Unidas de reportar la cuestión a la Corte Penal Internacional, para poder procesar al líder de Corea del Norte, Kim Jong Un como directo responsable”.
Recuerdo de la violencia nazi
Según los investigadores de la ONU, de 80 mil a 120 mil personas están actualmente prisioneras en cuatro cárceles. El mismo documento denuncia que en estas prisiones miles de personas han muerto en condiciones terribles: “privación de alimentos, trabajos forzados, ejecuciones, torturas, privaciones del derecho a reproducirse, abortos forzados e infanticidios”.
Los expertos de la ONU, confirman que estos crímenes pueden ser comparados con los crímenes perpetrados por los nazi durante la Segunda Guerra Mundial.
El juez australiano, Michael Kirky, presidente del Comité de la ONU, tiene la intensión de presentar una demanda ante la Corte Penal Internacional (CPI) o un tribunal ad hoc, afirmando que “la gravedad, la amplitud y la naturaleza de estas violaciones muestran un país sin algún equivalente en el mundo actual”.
La Corte Penal no tiene jurisdicción sobre Corea del Norte y China no quiere colaborar
La Corte Penal Internacional (CPI) que se ocupa de crímenes contra la humanidad puede actuar sólo contra los países que firman su Estatuto. Lógicamente, Corea del Norte no sería jurisdicción de la CPI. En ese caso, las Naciones Unidas, en especial el Consejo de Seguridad, debería dirigirse después de un voto unánime al tribunal de la CPI para pedir un juicio a Kim Jong Un (líder del país).
Sin embargo, se necesitaría del voto de China que no está dispuesta a incriminar a su aliado. La portavoz del gobierno chino, Hua Chunying, afirmó que esto no “mejoraría las condiciones del país”.
China podría también ser acusada de complicidad en la violación de los derechos humanos
“Pekín considera que el tema de los derechos humanos debe ser encarado a través del diálogo. Es claro que China teme quedar implicada porque el informe afirma que la República Popular China (RPC) se ha negado a ayudar la comisión durante la investigación” sostiene Cuscito.
China pero puede redimirse pidiendo a Corea del Norte de aplicar los derechos humanos
“Pekín puede pedir a Pyongyang de mejorar las condiciones internas y evitar procesos internacionales. Tiene la posibilidad de convencer a Corea del Norte a mejorar la condición de los detenidos y en general la condición de los propio
s ciudadanos. De hecho, la China había ya intervenido también durante la última crisis entre las dos Coreas para persuadir Pyongyang y su joven líder, Kim Jong Un a encontrar un compromiso razonab
le. No le conviene, ni siquiera a Pekín tener un aleado que crea tantos problemas a nivel internacional” confirma Cuscito.
Entonces cabe la pregunta: para qué sirve un informe que no puede llevar a un juicio internacional a Kim Jong Un. Precisamente, la presión que la Comunidad Internacional ejerce sobre Pyongyang puede hacer la diferencia. Cuscito explica que “como hemos visto, Estados Unidos, después de la publicación del documento ha sostenido la posición de las Naciones Unidas y ha pedido a Corea del Norte de tomar medidas”. Esto ha desencadenado la respuesta inmediata de China y ha puesto ante los ojos del mundo el problema y la tensión en la región.
Estados Unidos – China protagonistas y rivales
Cuscito asegura que la balanza china/estadounidense puede ayudar a presionar a Corea del Norte a mejorar la situación de los derechos humanos en ese país. “Estados Unidos en este momento actúa en la región Asia Pacifico una política de contención, dicha “Pivot to Asia” que consiste en limitar el elevado aumento económico y militar de la RPC. Pekín, aún así es el primer socio extranjero en dar crédito a EEUU. Por ende, la relación de interdependencia económica les lleva a dialogar”. Por ello, a China le conviene colaborar en materia de derechos humanos para mantener su status quo en la región.
China defiende a Corea del Norte para tener una ventaja política contra Estados Unidos
“La alianza con Corea del Norte es importante como posición anti EEUU, dado que Corea del Sur es un aliado de Washington y sede de numerosas bases militares americanas. Pyongyang tiene lejos a los estadounidenses de los confines de la RPC y por ende la apoya” dijo Cuscito
Testimonio de un misionero en Corea del Norte: “Estar con las personas que sufren es estar con Cristo”.
Padre Gerald Hammond, 80 años, estadounidense, es el único sacerdote católico a tener acceso al país de Kim Jong Un. El misionero ha llegado a la península coreana apenas después del final de la guerra que divide el país entre Norte y Sur.
Hoy vive en Seúl desde hace 54 años y es superior regional del Instituto de las misionarías de MaryKnoll. Desde 1998 logra entrar en Corea del Norte junto a algunas organizaciones humanitarias que visitan sobretodo los centros que curan la tuberculosis y desde entonces ha estado más de 50 veces.
Padre Hammond, en una entrevista concedida a Luca Fiore de la revista “Tracce” en abril de 2013, cuenta sus viajes a Corea del Norte. El gobierno controla todos sus movimientos y no le permite tener consigo ni celulares o computadoras.
Un sacerdote que cura la tuberculosis
El misionero no esconde su identidad como servidor de la Iglesia. El gobierno sabe que es un sacerdote, pero le prohibe de evangelizar y de hablar de política. Puede hablar con los pacientes e impartir la bendición sólo si ellos se lo piden.
El sacerdote católico explica a Fiore que en el país colabora con los funcionarios del departamento de la salud para curar la tuberculosis. “Es una enfermedad que se trasmite respirando el aire en lugares malsanos y por malnutrición”. Al respecto, confirma que el país es muy pobre: “frecuentemente falta el agua y la electricidad”.
“Pienso que el ejemplo sea mucho más importante de la palabra. Como dice el Santo Padre es necesario ser simples y humildes. Pienso a los pobres porque es exactamente mi misión”. Padre Hammond sostiene que “estar con la gente que sufre es estar con Cristo”.
Cristianos en Corea del Norte y libertad religiosa
Según Hammond en Corea del Norte hay 3 mil católicos de un total 23 millones de habitantes. En este país no existe una presencia oficial de la Iglesia debido a las restricciones en materia de libertad religiosa. Los cristianos fueron torturados y desplazados durante la Guerra de Corea, iniciada en junio de 1950.
Encarcelado misionero evangélico australiano
Asimismo, Jonh Short, 75 años de nacionalidad australiana, fue arrestado el domingo en Corea del Norte después distribuir públicamente material religioso. La esposa de Short lo define un “misionero” que entró en el país con una visa legal de turismo y denunció que se encuentra aislado en prisión. La pareja reside en Asia desde hace 40 años y vive en Hong Kong. Según la familia el hombre ahora podría ser condenado a 15 años de prisión. El caso no es aislado, el “proselitismo religioso” en Corea del Norte es un delito, también Kenneth Bae, ciudadano norteamericano se encuentra en la cárcel desde diciembre 2012 por intentar evangelizar.