Mañana se entrega el Premio Juan Pablo II de Comunicación que otorga la Fundación Crónica Blanca, un premio que este año ha recaído en Fran Otero, redactor de Vida Nueva y que realiza su labor especializado en temas sociales y religiosos.
En El Espejo de COPE Fran Otero muestra cómo se enfrenta día a día a su profesión y cómo:”el periodismo tiene una importantísima misión social, de contar la verdad, lo que sucede”. Sobre esta verdad, Fran muestra el ejemplo de las arrugas de la Madre Teresa y cómo detrás de ese desgaste hay una belleza, “detrás de la cual está la verdad”
Para el nuevo Premio Juan Pablo II de Comunicación, los periodistas antes de publicar deberíamos preguntarnos: ¿Esto interesa a la gente? y pide “alejarnos de los chismes y de los cuentos y mostrar lo que verdaderamente importa”.
– ¿Cómo recibiste la noticia?
La verdad es que un poco sorprendido y, sobre todo ilusionado. Con mucha alegría y con mucha responsabilidad, porque recibir un premio así es algo importante.
– Lo que menos nos gusta a los periodistas es hablar de nosotros mismos, pero la ocasión lo merece. ¿Por qué dedicarte al Periodismo y dentro de él a la información social y religiosa?
Tienes razón. Es complicado hablar de uno mismo cuando somos nosotros los que tenemos que contar las noticias. El periodismo tiene una importantísima misión social, de contar la verdad, de contar lo que sucede. Es un servicio a los ciudadanos, más que a los que tienen poder o para nosotros mismos. En el periodismo social y religioso yo tengo la oportunidad de poder poner voz a mucha gente que habitualmente no tienen voz. Es muy importante para mi vida como periodista el ser voz de los sin voz, que Crónica Blanca defiende desde hace muchos años.
– Hablas de la misión de contar la verdad. ¿Qué es la verdad?
Es un poco complicado. La verdad es algo que estamos continuamente buscando y la verdad es aquello que es bueno, que es bello; es aquellos que es verdadero, que probablemente no tenga la apariencia de bonito como hoy lo conocemos, pero es auténtico. Recuerdo, ahora que me preguntas esto, una reflexión que a mí me sirvió mucho, que viví en el entorno de Crónica Blanca y que tiene mucho que ver con el Papa Francisco.
Es una charla que el cardenal Bergoglio dio y que se titulaba: ¿Quién es tu prójimo? En ella hablaba de la verdad, de la bondad, de la belleza y de muchas cosas bellas que aparentemente no lo son, como por ejemplo, las arrugas de la Madre Teresa. Esa mujer totalmente desgastada, que significa un desgaste por los pobres, por los que no tienen casa, por los demás. Es la belleza detrás de la cual está la verdad. Los periodistas estamos siempre buscando la verdad.
– Dice el documento “Inter Mirífica” del que se cumplen 50 años que “no hay que hablar sólo y siempre de religión sino que los medios de comunicación cristianos debemos hablar de lo que preocupa al ser humano, de la vida, de la sociedad. ¿Qué aporta al periodista el ser cristiano, quizá una mirada distinta?
Absolutamente. En realidad los cristianos somos igual que el resto, tenemos los mismos problemas y las mismas inquietudes, pero los periodistas cristianos tenemos una sensibilidad especial por lo que le pasa a la persona: una persona que tiene nombre y apellidos, que tiene unos sufrimientos y tenemos especial sensibilidad por personas de otros países que viven en nuestra misma ciudad y lo están pasando mal o que están siendo abandonados y excluidos por dinero, por estudios, o por lo que sea. Esa sensibilidad hacia los pobres nos la da la fe. Esa visión de los hijos de Dios nos hace que el que esté a nuestro lado, aunque no lo conozcamos nos interese su vida. Cuando un periodista pierde eso, pierde lo fundamental.
– A veces en el Periodismo se encuentra la “seducción de la cizaña”. ¿Cómo lo superas?
Es difícil. Sabes cómo lo hago: diciendo ¿Esto interesa a la gente? Recuerdo que, a veces los periodistas nos gusta mucho comentar, como por ejemplo últimamente con la elección del nuevo secretario general de la CEE. Yo me preguntaba, ¿pero estos comentarios le interesarán a alguien, al cristiano y al católico que va a su parroquia los domingos? Si te paras a pensar no le interesan nada estos pequeños “líos periodísticos” o estas opiniones. Quizá interesa más lo que pueda decir la Iglesia en determinado momento. Debemos alejarnos de los chismes y de los cuentos y mostrar lo que verdaderamente importa.
Hoy celebramos a...