El cardenal Maradiaga alaba la labor para combatir el VIH en los países pobresMediante una carta, Monseñor Oscar Andrés Rodríguez Maradiaga, presidente de Caritas Internationalis, muestra que Caritas “no espera la conmemoración anual del Día mundial del sida para cumplir su mandato de servicio a aquellos y por aquellos que viven con o están afectados por la epidemia del VIH y el sida” y recuerda cómo durante 25 años “hemos manifestado “la ternura y la cercanía” con ellos”.
El VIH causa incerteza e inseguridad, tanto por el propio futuro, como por la respectiva familia y puede provocar serias enfermedades e incluso la muerte”, explica el arzobispo de Tegucigalpa que muestra que para que se den “Cero nueva infecciones del VIH” es necesario entrar en las relaciones interpersonales, limitando “la actividad sexual a un matrimonio permanente y fiel, entre un hombre y una mujer, y evitando el uso de todas las drogas inyectables que no hayan sido recetadas y supervisadas por profesionales de atención a la salud”.
De igual manera, explica que se pueden alcanzar las “Cero muertes relacionadas con el SIDA” con “un diagnóstico temprano y el tratamiento de la infección del VIH”.
En los últimos años, se han hecho muchos progresos, gracias a la solidaridad internacional, para ampliar ese tratamiento a unos 10 millones de personas que viven en países de ingresos bajos y medios”, explica monseñor Rodríguez Maradiaga, que muestra que “eso no es suficiente”.
Por ello pide una mayor responsabilidad a los gobiernos nacionales y recuerda cómo “lamentablemente, las personas que viven con o están afectadas por el VIH siguen haciendo frente a la discriminación, el estigma e incluso la violencia”.
“No existe una vida humana más sagrada que otra, como no existe una vida humana cualitativamente más significativa que otra”, finaliza en su carta el Presidente de Caritas Internacional.