Testimonios desgarradores de quienes siguen predicando en el centro del terrorEn este último tiempo la oscuridad de la guerra en Siria ha ocupado la primera plana de los diarios de todo el mundo.
La guerra es algo trágico, lo sabemos, sin embargo, es en estas situaciones de más prueba en las que la luz de la esperanza toma un color del todo especial. Por esto, a continuación queremos compartir con ustedes un poco de la experiencia misionera de dos sacerdotes latinoamericanos, el Padre David Fernández de Argentina, y el Padre Rodrigo Miranda, chileno. Ellos pertenecen al Instituto del Verbo Encarnado, y su tierra de misión ha quedado en el centro del terror, la ciudad de Alepo.
El Instituto del Verbo Encarnado es una congregación religiosa nacida en Argentina el 25 de marzo de 1984. Su fundador, el Padre Carlos Miguel Buela recibió la inspiración de fundar esta obra un día 3 de mayo, en el cual se celebra en Argentina el Cristo de la Quebrada, lugar donde él muchas veces había trabajado. Prontamente la pequeña obra se extendió a los 5 continentes, viendo nacer progresivamente, además de la rama masculina apostólica, la rama contemplativa, el Instituto gemelo, fundado por el mismo Padre, llamado Servidoras del Señor y de la Virgen de Matará, para religiosas.
Actualmente es esta congregación la que está en Alepo, y a continuación ofrecemos algunos de sus mensajes en este último tiempo de guerra:
14 de mayo:
Queridos amigos,
Gracias por los permanentes mensajes de apoyo.
Hemos tenido muchos y prolongados cortes de teléfono e internet, además de los habituales cortes de luz… Así que no hemos podido comunicarnos antes.
Nosotros estamos muy bien, gracias a Dios. Aunque la situación sigue empeorando. Hemos comenzamos el Mes de María, que aquí es una devoción muy fuerte (rosario y misa diaria). La gente estaba esperándolo de manera especial este año, para pedirle a la Virgen por la paz.
¡Gracias por recordarnos en sus oraciones!
14 de julio:
Alepo, 14 de julio de 2013
Queridos Amigos:
Hace tiempo que no escribimos… Se nos ha hecho difícil mantener el contacto. Tenemos muy limitado acceso a teléfono e internet, y las pocas horas de electricidad que llegan por día nos obligan a andar corriendo para llegar a hacer al menos las cosas más necesarias.
Pero, aun cuando no podamos tener contacto frecuente, ustedes saben que los sentimos junto a nosotros, acompañándonos con sus oraciones ¡Y créannos que no es poca cosa en estos momentos!
La situación no ha mejorado, sinceramente todo lo contrario! Los enfrentamientos en estas últimas semanas han recrudecido. En plenos barrios céntricos se multiplican las víctimas civiles, cada día se escuchan sucesos más horrorosos. Y se ha sumado un nuevo agravante: desde hace ya varios días la ciudad está completamente sitiada.
Nadie puede entrar ni salir de ella, ni pasar con facilidad y sin riesgo vital, de un barrio a otro. Tampoco se permite el paso de alimentos para abastecer a la población ni siquiera en sus necesidades básicas. Y como era de esperar, en los mercados ya no se encuentra verdura, ni fruta, ni carne, ni leche, ni siquiera pan (que es el alimento básico e indispensable para cualquier comida del mundo árabe).
También el suministro de agua está restringido a unas pocas horas cada ciertos días. En las panaderías que aun consiguen harina, las filas de gente hambrienta son interminables. Esperan hasta 8 horas a que les llegue su turno para poder llevarse un poco de pan. Y no pocas veces se arman peleas que terminan en sangrientos tiroteos. La interrupción de abastecimiento de gasolina ha obligado a los transportes públicos a disminuir o suspender sus servicios y son pocos los vehículos particulares que transitan aun las calles.
Todo esto ha desencadenado un desbarajuste económico de terribles y preocupantes consecuencias para los habitantes de esta ciudad. La mercadería que aun se encuentra en los negocios se ha elevado a precios inalcanzables. Y el hambre ya está arrastrando al saqueo.
Todo parece conducir al desaliento, y a apagar definitivamente la tan amenazada llama de la esperanza en los corazones. Sin embargo… como prueba de la fuerza del bien sobre el mal seguimos viendo nuevos y vigorosos frutos espirituales. ¡Y es que tanto sufrimiento no puede ser en vano!
“Gracias a Dios” (Alabado sea Dios), responden al preguntarles cómo están, siempre, "gracias a Dios”. Expresión de una profunda y humilde actitud de sumisión a la voluntad de Dios y a su sabia providencia que no abandona. Padres de familia que no saben por cuánto tiempo podrán alimentar a sus hijos; jóvenes que ven truncado su futuro y arrebatados sus anhelos, niños que viven atemorizados. Todos siguen rezando, con un fervor y una perseverancia admirables.
Muchos vienen caminando desde lejos para participar de las actividades y de la Santa Misa. Caminan 45 minutos y hasta una hora, y se exponen al peligro que hay en toda la ciudad, ¡pero no dejan de venir! Ellos dicen que esto es lo que los está sosteniendo y por eso no quieren dejar de hacerlo. En la misa de ayer varios lloraban. Lloran silenciosamente delante de Nuestro Señor, desahogando sus angustias ante el único que puede consolarlos. Y siguen sonriendo y diciendo: “Gracias a Dios”.
¡Recemos por la paz! No bastan las reuniones y alianzas. Esta horrible clase de mal solo podrá vencerse con oraciones y sacrificios. Por eso les rogamos, a cada uno de ustedes a quienes les llegan estas líneas, que no dejen de rezar por Siria, y ahora más que nunca! Y, para que se levante el asedio a la ciudad de Alepo.
¡Unamos nuestras súplicas para que al fin reine la paz en esta tierra bendita!
Padres y Hermanas Misioneros en Alepo
3 de agosto:
Alepo, 03 Agosto 2013
Queridos Amigos:
¡Gracias por sus mensajes, y sobre todo por sus oraciones! La ciudad sigue sitiada y con intensos combates, pero desde hace algunos días han permitido la entrada de gasolina y alimentos, aunque de manera muy racionada.
Obviamente esta terrible situación de guerra ha impedido a los jóvenes de Siria viajar a las Jornadas que se realizaron en Brasil, pero no logró impedir que se reunieran en Alepo unidos espiritualmente al Papa Francisco y a los jóvenes del todo el mundo!
Nosotros participamos en la comisión organizadora del Encuentro y experimentamos así, los fuertes lazos que unen a los distintos ritos católicos que componen esta Iglesia de Siria.
12 de agosto:
A pesar de que la situación de guerra aquí en Alepo sigue muy complicada, en este mes de agosto tenemos en nuestra Catedral 4 tandas de Ejercicios Espirituales! dos para religiosas (en inglés), y otras dos para nuestros jóvenes (en árabe). Todos predicados por el Padre Rodrigo Miranda. En estos días tiene lugar el Ejercicio de varones, con 15 ejercitantes! Les pedimos muchas oraciones.
Misioneros en Alepo, Siria.
26 de agosto:
Hacer ejercicios espirituales encerrados entre cuatro paredes y con los estruendos de los bombardeos como música de fondo es todo un desafío. Ayer comenzamos la cuarta tanda: para mujeres. ¡Y las ejercitantes son 24! Recen por ellas, ¡para que Dios premie con santos frutos semejante coraje!
Misioneros en Alepo
5 de septiembre:
Las oraciones de Aleppo para que pueda evitarse la intervención militar
“Aquí la gente vive en la incertidumbre y el sufrimiento, pero nadie espera ser liberado con las bombas y misiles de una intervención militar exterior. A mi también me parece que es una locura realizar acciones bélicas para levantar la bandera de la paz. Todos oramos para que no se realice esta intervención, y recuperemos de verdad la paz”.
Con estas palabras explica el párroco David Fernández, misionero católico del instituto del Verbo Encarnado, la reacción de los fieles de Aleppo frente a los rumores sobre un inminente ataque a las posiciones del ejército de Assad por fuerzas extranjeras.
Don David describe de nuevo Aleppo como una ciudad sitiada por las milicias rebeldes, donde “los hornos están cerrados, ya que se carece incluso de la harina para hacer el pan”; no se puede dormir ni de día ni de noche por el rugido de los enfrentamientos y bombardeos que tienen lugar en los suburbios de las afueras.
En medio de todo esto, añade don David, “mucha gente lleva su cruz con fe y valor, pidiendo el don de la paz a Dios, el único al que aún confían sus esperanzas”. En agosto, en la ciudad sitiada de Aleppo, en la parroquia católica de rito latino se predicaron retiros para jóvenes, para las religiosas y madres. En estos días se está realizando otro para los sacerdotes, al que participan sacerdotes de diversos ritos.
9 de septiembre:
Queremos avisarles que estamos bien. No tenemos internet y los teléfonos prácticamente no funcionan (los celulares están totalmente caídos y la línea terrestre casi no anda). Sigan rezando por la paz en Siria.
Misioneros del IVE en Siria.
13 de septiembre:
Queridas familias y amigos,
Hoy pude comunicarme con las hermanas que se encuentran en Siria. Me dijeron que están muy bien, que siguen trabajando y con muchas actividades apostólicas, más aun después de las seis tandas de Ejercicios Espirituales que los Padres predicaron el mes pasado.
Dicen que no han podido comunicarse en estas últimas dos semanas pues el teléfono y el internet están prácticamente cortados.
Siguen sosteniendo y ayudando a la gente que diariamente vienen a misa y a las actividades que se realizan sobre todo los fines de semanas. En medio del sufrimiento ven como los fieles crecen espiritualmente y buscan la fuerza en Dios.
Mandan muchos saludos a todos y cuando tengan internet se comunicarán con sus familias y con aquellos que le han escrito.
En Cristo y María Santísima,
M. María de la Contemplación
Superiora Provincial del Instituto Servidoras del Señor y de la Virgen de Matará en Medio Oriente.
En definitiva, y para no hacerlo más largo, Siria sufre, y en medio del dolor la esperanza reluce, porque es aquí donde claramente se ve lo de San Pablo: “a tiempo y destiempo, Cristo es predicado.