El papado le cambió “la cara de velorio” al cardenal Bergoglio

A Roma se fue con una valijita

Sucesor de Jorge Mario Bergoglio en Buenos Aires, monseñor Poli dijo que el Papa, desde su punto de vista, está “contento” y “entusiasmado” con su misión al frente de la barca de Pedro.  Según el primado de Argentina, al Papa Francisco hasta le cambió la cara de “velorio bárbara” que tenía antes de la elección pontificia.

Monseñor Poli, quien fue llamado por el Papa para sustituirlo en Buenos Aires dijo que el cardenal Bergoglio se había ido a Roma “con una valijita con dos pares de medias, dos calzoncillos, como para venirse de vuelta… y allá se quedó. Y entre una de las cosas, recuerda que el papa Benedicto le dejó algo arriba de la mesa, unos papeles en el palacio pontificio. El Papa está viviendo en un hotel, el Hotel Santa Marta. Todos, un poquito para chusearlo, le dijimos:

— ¿No vas a ir al palacio pontificio?"

Y él, con sonrisa, nos respondió:

–¿Ahí? ¿Para que me afanen? ¡No!"

Los frutos del Espíritu

Más adelante, monseñor Poli recordó que al cardenal Bergoglio le decían que siempre iba con una cara “de velorio bárbara”.  Y contó que alguna vez en una de las villas del extrarradio de Buenos Aires, un párroco le dijo al actual Papa: "Si vas a venir con esa cara, nos vas a arruinar la foto a todos…”.

¡Pero resulta que ahora el Papa está hecho una Pascua!”, dice el prelado argentino, quien agrega que los obispos de su tierra lo “cargan”:

–¿Y ahora? ¡Allá nunca una sonrisa y acá sos una Pascua! Acá repartís sonrisas para todo el mundo.

Y él levanta el mentón y dice

–Es el fruto del Espíritu.

El arzobispo Poli transmitió a su público improvisado una mala noticia: “el Papa ya no es más argentino. Ya es internacional, católico, universal, pero especialmente se lo han apropiado los tanos (los italianos) que lo quieren mucho”.

El arzobispo Poli  preguntó al final de su charla:

–¿Ustedes saben qué es lo que pide él a todos ustedes, no? ¿Qué pide él? Que recemos por él. Él necesita mucha fuerza, nuestra oración.

Y agregó  que “si les sobra un Ave María por ahí, lo encajan para mí también”.