Algunas diócesis envían delegaciones para visitar a los migrantes
La arquidiócesis de México ha organizado por tercera vez una visita pastoral a los hermanos migrantes que trabajan en los campos de cultivo de Estados Unidos y a sus familias para llevarles un mensaje de esperanza y solidaridad, según informa el SIAME de la Conferencia Episcopal Mexicana.
Atendiendo a la invitación de la Red de Trabajadores Agrícolas y Migrantes Católicos y la diócesis de
Venice (Florida), la delegación recorrió las ciudades de Fort Myers, Myakka, Arcadia, Bonita Springs,
Arcadia y Mocali, informó la hermana Arlina Barral Arellano, responsable de esa comisión arquidiocesana.
En estas ciudades se encuentran muchos migrantes originarios del Estado de Guerrero, por lo que se invitó al arzobispo de Acapulco, monseñor Carlos Garfias Merlos, para acompañar la visita y conocer de cerca las condiciones sociales, de trabajo, vivienda, salud, y otros problemas que afectan a los trabajadores del campo.
La hermana Barral Arellano, miembro de esta delegación, informó que durante la última semana de enero se recorrieron campos de tomate, lecherías y algunas de las casas donde viven temporalmente los migrantes. “Hablamos con la gente, les llevamos el acompañamiento de la Iglesia de México y cada día celebramos la Misa en español, lo cual fue muy emotivo”.
“Es una experiencia muy triste por un lado, debido a la difícil situación en la que viven estos hermanos,
pero muy gratificante, al ver la emoción en sus rostros cansados y quemados por el sol cuando al final de la jornada se les presentaba la oportunidad de tener un encuentro con su fe”, precisó.