¿Por qué puede resultarnos útil y educativo prepara un calendario de Adviento? Nuestros hijos ya han comenzado a disfrutar de los paseos por calles iluminadas y de los interminables catálogos de juguetes. Y, claro, como es lógico, también han comenzado a hacernos una pregunta que puede convertirse en una “tortura” para muchos padres: “¿Ya es Navidad?”
Utilizo la palabra “tortura” con cariño pues como padres sabemos que tenemos que desarrollar la virtud de la paciencia con nuestros hijos. Pero, cuando falta un mes para Nochebuena y ya comienzan a preguntar por la llegada de la Navidad, nos sentimos igual que cuando comenzamos un viaje y nos preguntan: “¿Cuánto queda? ¿Ya hemos llegado?”
La didáctica del calendario de Adviento
A los niños les resulta difícil la percepción del tiempo, les cuesta aprender cuándo fue ayer, cuándo será mañana, la hora o el calendario. ¡Menos mal que en el mundo hay excelentes pedagogos! Y, para este tema de la Navidad, los alemanes tiene un gran instrumento: El calendario de Adviento.
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¿De dónde viene el calendario de Adviento?
Esta tradición se ha extendido a otros países pues, además de bonita y de estar cargada de significado, es muy educativa.
Se trata sencillamente de un calendario que nos permite hacer la cuenta atrás hasta la llegada de la Nochebuena. Arranca el 1 de diciembre y termina el 24. Se comercializa en muchos lugares ofreciendo un pequeño chocolate para cada día pero también son muchas las familias que preparan su calendario de Adviento personalizado.
Aquí te exponemos varias propuestas. En cada bolsita, caja, sobre o paquete, puedes introducir un pequeño “regalo” que transmite en parte qué es la Navidad.
24 mensajes
Este “regalo” también puede ser un mensaje inspirador para invitar a quien lo lea, tanto niños como mayores, a sacar la mejor versión de sí mismo y prepararse así, con ilusión, para vivir una de las fiesta más importantes del año. También puedes acudir a la Biblia para ofrecer versículos que ayuden a rezar.
Aquí te propongo 24 mensajes a modo de inspiración:
- Ayudaré en casa cuando me necesiten.
- Hoy saludaré con cariño a las personas que me encuentre.
- Colocaremos la corona de Adviento y encenderemos la primera vela.
- Hoy visitaremos a alguien que esté solo.
- Compartiré algo mío con un compañero.
- Abrazaré un ratito a mi hermano/ mi papá /mi mamá.
- Elegiré un juguete y se lo regalaré a un niño que no tenga.
- Pondremos el árbol de Navidad.
- Haré un dibujo para alguien que no tiene familia.
- Pondremos el portal de Belén.
- Pensaré en los niños que no tienen nada y seré cuidadoso con mis cosas.
- Jugaré con mi hermano.
- Le diré algo bonito a mi profesora.
- Me esforzaré por hacer bien mi trabajo.
- Escribiré a alguien para felicitarle la Navidad.
- Rezaré por quienes tienen hambre.
- Participaré en una acción solidaria.
- Escucharemos villancicos.
- No me pelearé con mi hermano.
- Me acercaré a jugar con un compañero que no tiene muchos amigos.
- Le diré “te quiero” a alguien que me importe.
- Perdonaré a todo el que me moleste.
- Hoy leeré la historia del Nacimiento de Jesús.
- Celebraré la Nochebuena con mi familia ¡Feliz Navidad!
Otra idea para vivir el Adviento: Prepara la cuna del Niño Jesús
Otra actividad para vivir el Adviento con sentido es esta que nos propone mi compañera Adriana Bello. Una tierna idea que te ayudará a ser mejores cada día.
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