Las palabras claves son “trasparencia” y “rigor científico”. El papa Francisco aprobó una reforma del reglamento que rige el trabajo de los peritos médicos consultados por la Congregación para las Causas de los Santos en el estudio de posibles milagros, informó el Vaticano este viernes 23 de septiembre.
Se trata de un cambio en la legislación de 1976; la última modificación fue realizada hace 40 años bajo el pontificado de Pablo VI. Ahora, el papa Francisco autorizó un cambio en la reforma de los reglamentos de los milagros de la fase romana, especialmente relacionado con el ámbito de la asesoría médica.
Esto para verificar que sea un milagro de curación inexplicable para la ciencia y así el aspecto científico se refuerza y se distingue del aspecto teológico.
Tres comisiones de médicos evaluarán los casos y se podrá llamar a expertos externos del albo (registro profesional) de médicos elegidos por la Congregación para las Causas de los Santos. El caso no puede ser examinado más de tres veces, entre otras novedades.
La reglamentación es diversa pero no cambia de manera sustancial. Los superiores de la Congregación vaticana serán los encargados de la selección de los médicos que hacen la pericia.
El postulador no elige y no conoce al médico o los médicos que realizará la pericia en el Tribunal. Para examinar otra vez el presunto milagro se pide una consulta de nuevos miembros.
Una consulta –el equipo que evalúan el caso- puede realizar un máximo de tres revisiones, pero con diversos equipos médicos y en base a cada caso específico.
Un paso más hacía la transparencia: los pagos a los “médicos expertos” serán realizados sólo a través de una cuenta bancaria. Antes, se aceptaban pagos en efectivo y un recibo de pago interno con timbre del Vaticano. Ahora, la Congregación exige que los pagos dejen rastro bancario.
Las tarifas son públicas. Los dos peritos de oficio, a quienes se pide una primera asesoría antes de enviar el todo a la comisión médica, reciben 500 euros. Los peritos médicos reciben 3.760 euros, pago divido entre máximo 7 peritos (537 euro cada uno).
Los peritos deben estar de cuerdo a mayoría de 5 a 7. Antes era 5 más 1, pero con Benedicto XVI se modificó y pueden ser 4 de 6. (Art. 15). Y están sujetos al secreto en el proceso de verificar el milagro.
Según explica Marcello Bartolucci, arzobispo, secretario de la Congregación para las Causas de los Santos, el milagro, necesario para la beatificación y para la canonización – recuerda la introducción del Reglamento- se “examinó siempre con el máximo rigor”.
Asimismo, explicó que “ya en la Edad Media se hizo uso de peritos médicos para los cuales, el 17 de septiembre de 1743, se creó un registro profesional específico por Benedicto XIV”.
Hoy celebramos a...