“Ya no soporto ver más el sufrimiento de niños, jóvenes y ancianos. Hombres y mujeres deambulan en Venezuela de un lado a otro buscando comida y medicamentos, y yo como sacerdote no me puedo quedar de brazos cruzados sin hacer nada por ellos”.
Las expresiones son del sacerdote Lenín Bastidas Villegas, párroco de Nuestra Señora de la Soledad, en el estado Anzoátegui, ratificando para Aleteia la decisión hecha pública el pasado 15 de agosto durante la fiesta patronal, cuando informó a sus fieles y al obispo de Barcelona que iniciará una caminata por la paz y reconciliación de Venezuela.
“En esta coyuntura tan difícil, si no nos adelantamos los hombres de Dios que somos los hombres de la paz, entonces se van adelantar los hombres de la violencia”, añadió el todavía joven sacerdote, quien ya cuenta con 8 años de ordenado.
Desde hoy 21 de agosto tiene prevista una caminata por la ruta del llano oriental venezolano que comprende las ciudades de El Tigre, Valle de la Pascua, El Sombrero, San Juan de los Morros, Maracay, Valencia y Caracas.
Son seis estados y algo más de setecientos kilómetros que recorrerá únicamente con su vestimenta sacerdotal.
Una de sus motivaciones es impedir que se generen hechos de violencia ante el llamado de la Toma de Caracas, hecha por la oposición para el primero de septiembre.
“No quiero que mi pueblo corra el peligro de que se vayan a masacrar unos con otros mientras los políticos después se pelean el puesto de gobierno. Por eso voy a adelantarme a esa fecha para promover y anunciar la paz entre los venezolanos”, dijo.
Pero el llamado del padre Leín no solo es para la dirigencia política: también incluye a las iglesias católicas y de otras confesiones, según explicó a través del hilo telefónico.
“Quiero hacerles un llamado a los líderes verdaderos, a los políticos, a los líderes que tenemos dentro de la Iglesia católica y a los cristianos en general para que actuemos antes de que esta situación se nos escape de las manos”, expresó.
Salida democrática a la crisis
La petición del sacerdote es concreta: “Me gustaría que los señores obispos convoquen
a una vigilia de ayuno y oración frente a la sede del Consejo Nacional Electoral, CNE, para que desde este organismo nos den una salida democrática a la situación tan terrible que está viviendo nuestro pueblo venezolano”.
Considera que la fecha más viable para esta jornada intensa de oración es el 30 de agosto. “Todos estemos plantados allá, frente al CNE, haciendo la vigilia”, para evitar cualquier hecho de violencia “que se quiera presentar”.
Misionero itinerante
Aunque desconoce si tendrá acompañamiento de personas durante su caminata, Lenin dijo que guardará con celo su condición sacerdotal más la disponibilidad de un misionero para atender sacramentalmente a las personas que lo soliciten en su ruta.
“Creo que es el momento de la transparencia para poder motivar el camino a la reconciliación y a la paz (…) quiero sentir y que la gente sienta que es Cristo quien va caminando”, expresó finalmente.
Por Ramón Antonio Pérez // @GuardianCatolic
Hoy celebramos a...