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Annie Besant… ¿una líder política o una precursora de la Nueva Era?

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Luis Santamaría - publicado el 05/10/15

Una de las principales representantes del ocultismo contemporáneo, ensalzada por Google

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El pasado 1 de octubre, el portal Google homenajeó los 168 años del nacimiento de Annie Besant con un “doodle” (logotipo especial que pone con motivo de una efeméride) en la India. Las razones que dio para hacerlo se basaron en la importancia de su figura política, ya que, siendo de origen inglés, defendió fuertemente la independencia del país asiático y fue una prolífica escritora. Sin embargo, desde muchos lugares se ha recordado que Annie Besant (1847-1933) destaca más por ser una importante figura del ocultismo, considerada una de las principales precursoras de la Nueva Era.

Sus primeros pasos, entre el ateísmo y el socialismo

El importante Dictionary of Gnosis & Western Esotericism (Diccionario de gnosis y esoterismo contemporáneo) dedica varias páginas a Besant. En ellas, James A. Santucci, profesor de Religión Comparada en la Universidad del Estado de California, ofrece detalles de interés de su vida.

Nació en Londres de familia irlandesa con el nombre de Annie Wood, hasta que se casó en 1867 con el pastor anglicano Frank Besant, y tuvieron dos hijos. Desde muy pronto, por diversas circunstancias vitales, asumió posturas doctrinales contrarias a la fe cristiana, declarándose en contra de la existencia de Dios y, por consiguiente, de la divinidad de Cristo. En su trayectoria influyó mucho el reverendo Charles Voysey, declarado hereje por la Iglesia anglicana, y también Thomas Scott, un librepensador anticlerical.

Pronto Annie se puso a divulgar por escrito sus ideas, algo que le echó en cara su esposo, que también le pidió que volviera a su Iglesia. El desenlace fue la separación matrimonial en 1873. Entró a formar parte de la National Secular Society (Sociedad Secular Nacional, entidad promotora del ateísmo), en cuyo periódico escribió con asiduidad, asumiendo muchas de las causas feministas. En este tiempo se convirtió en la primera mujer en defender en público el control de la natalidad. En 1878 fue nombrada secretaria de la Malthusian League (Liga Malthusiana, entidad promotora de la contracepción).

Su siguiente paso fue un compromiso con el socialismo, y así entró en 1885 en la Sociedad Fabiana (movimiento británico promotor de la socialdemocracia), apadrinada por el escritor George Bernard Shaw, que también influyó mucho en ella. En 1887 fundó la Law and Liberty League (Liga de la Ley y la Libertad) y se encargó de la edición de su revista para defender así la libertad de expresión y la causa de los pobres y desempleados.

Su conversión al ocultismo

En esta época destaca en sus escritos la idea de fraternidad, “la Fraternidad del Hombre”. Dice en los mismos que en esta fraternidad “el servicio al Hombre debe tomar el lugar dado antiguamente al servicio a Dios”. Para lograr este empeño se dio cuenta de que la ideología socialista no era suficiente, y por ello empezó a flirtear con el ocultismo. Su conversión de la política a la Teosofía vino de la mano de la obra La doctrina secreta, de Helena P. Blavatsky, que leyó y recensionó en 1889. Poco después entró a formar parte de la Sociedad Teosófica y visitó rápidamente a su fundadora y líder, Blavatsky, que enseguida vio en ella a una colaboradora entusiasta, dejándole formar parte del círculo más interno de la Sociedad Teosófica. De hecho, la nombró coeditora de su revista, titulada entonces Lucifer.

Muerta madame Blavatsky en 1891, Bessant pasó a ser la presidenta de la Sección Esotérica de la Sociedad Teosófica. En 1893 viajó a Sri Lanka y a la India, donde se encontró con Henry S. Olcott (el sucesor más oficial de Blavatsky en una fragmentada Teosofía). Aquí comenzó su amor a la India, país en el que vivió de forma permanente desde 1896. Estudió sánscrito y el hinduismo, llegando a traducir el Bhagavad Gita en 1895, y se empeñó en obras educativas, abriendo colegios. También comenzó a frecuentar la compañía de Charles W. Leadbeater (otro importante teósofo fundacional), lo que aumentó su interés por lo esotérico. Juntos escribieron varios libros en torno a la reencarnación o el plano astral, entre otros temas típicos del ocultismo. No olvidemos que fue la inventora del concepto “registros akáshicos”, muy divulgado en el esoterismo y en la Nueva Era.

Otra de sus tareas fue la de realizar una interpretación teosófica de la fe cristiana, algo que quedó sistematizado en su obra Esoteric Christianity (Cristianismo esotérico, 1901). También escribieron otra obra fundamental en la doctrina ocultista sobre la clarividencia: Thought-Forms (Formas de pensamiento, 1901). Cuando murió Olcott en 1907, Annie Besant fue elegida presidenta de la Sociedad Teosófica. Fue en este tiempo cuando Leadbeater “descubrió” al joven Jiddu Krishnamurti y afirmó que se trataba de la encarnación del Señor Maitreya, el Instructor del Mundo (el Cristo de la Nueva Era). Ya Blavatsky había hablado de la venida de un Maestro de Sabiduría, pero parece que la idea de un nuevo Mesías identificado con Maitreya se debió a Besant en el cambio de siglo.

Figura política en la India

En cuanto a la sociedad y la política de la India, Annie Besant promovió diversas reformas, entre las que se encontraban las relaciones entre razas y entre las diversas castas, la defensa de los intocables y el papel de la mujer en la vida pública. En 1914 compró un periódico y le cambió el nombre por el de New India, defendiendo el fin del gobierno colonial. En 1916 creó una liga para luchar por la independencia de la India. Su papel fue siendo cada vez más importante, llegando a la presidencia del Congreso Nacional Indio en 1917… pero su figura se vio eclipsada poco después por el liderazgo de Mohandas Gandhi en la década de los 20.

En la década de los 20, cuando su papel político fue declinando, se dedicó más a la promoción del “mesías” Krishnamurti y a la Orden de la Estrella de Oriente. Tras su disolución en 1929 comenzaron sus problemas de salud. Murió en 1933 en la central de la Sociedad Teosófica en la ciudad india de Adyar. Fue incinerada en el Jardín del Recuerdo del movimiento teosófico y parte de sus cenizas se depositaron allí, mientras que el resto fueron arrojadas al río Ganges en Benarés.

Masona y fundadora

En su Diccionario enciclopédico de las sectas Manuel Guerra, miembro de la Red Iberoamericana de Estudio de las Sectas (RIES), destaca que Annie Besant se inició en la masonería mixta (en la obediencia conocida como Derecho Humano), “donde obtuvo los grados más altos… fue vicepresidenta del Consejo supremo para Gran Bretaña y logias de esta obediencia”. También señala que “en función de su cargo organizó la rama inglesa con el nombre ‘Co-masonería’, de cuyo Gran Consejo es Maestra en 1923”. No sólo eso, sino que en 1912 fundó la Orden del Temple de la Rosa Cruz. Según explica J. Felipe Alonso, lo hizo “intentando amalgamar tradiciones esotéricas de distinto signo”.

El historiador Nicholas Goodrick-Clarke explica que lo que hizo Besant al fundar la Co-masonería fue introducir ideas masónicas marginales en la Teosofía, y destaca que Charles W. Leadbeater, con quien tanto se relacionó Besant, y que tenía orígenes anglicanos, fundó en 1917 la Iglesia Católica Liberal, muy relacionada con esa Co-masonería, y que introduciría elementos más cristianos en el sistema doctrinal y ritual teosófico. El sociólogo Massimo Introvigne señala en Il cappello del mago que la Co-masonería, desde la intervención de la teósofa inglesa, es “una de las caras de la multiforme actividad de la Sociedad Teosófica”.

Por otro lado, la acción de Annie Besant sirvió indirectamente para que se fundara otra rama fundamental del esoterismo contemporáneo, la Sociedad Antroposófica, ya que el fundador de ésta, Rudolf Steiner, rompió con la Teosofía e inició su propio movimiento ocultista al considerar que la Sociedad Teosófica se había inclinado demasiado hacia el orientalismo bajo la presidencia de Besant, y él pretendía una versión más occidental y “cristiana”. Steiner había conocido a Besant en un viaje a Londres en 1884. Años después, siendo el dirigente de la rama alemana de la Teosofía, le hicieron ver que en sus conferencias se alejaba de lo defendido por su superiora. La ruptura definitiva tuvo lugar en 1913, cuando Steiner se negó a aceptar la imposición a todos los teósofos de la pertenencia a la Orden de la Estrella de Oriente, creada por Annie Besant para preparar al mundo para el regreso del Cristo en la persona del joven indio Krishnamurti (quien, por cierto, negó ser el Señor Maitreya en 1929, repudiando públicamente la Teosofía).

Precursora de la Nueva Era

En el documento de la Santa Sede Jesucristo, portador del agua de la vida, sobre la New Age, se cita a Annie Besant cuando se habla (en su apartado 2.3.2) de que “la matriz esencial del pensamiento de la Nueva Era ha de buscarse en la tradición esotérico-teosófica que gozó de gran aceptación en los círculos intelectuales europeos de los siglos XVIII y XIX. En particular, tuvo vigencia en la francmasonería, el espiritismo, el ocultismo y la teosofía, que compartían una especie de cultura esotérica”.

Según leemos en el documento vaticano, “un componente destacado de los escritos de Madame Blavatsky era la emancipación de la mujer, lo cual implicaba un ataque contra el Dios ‘masculino’ del judaísmo, del cristianismo y del Islam. Invitaba a volver a la diosa madre del hinduismo y a la práctica de las virtudes femeninas. Estas ideas continuaron bajo la guía de Annie Besant, que se hallaba en la vanguardia del movimiento feminista. En la actualidad, la Wicca y la ‘espiritualidad de las mujeres’ continúan esta lucha contra el cristianismo ‘patriarcal’”.

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