Aleteia logoAleteia logoAleteia
viernes 29 marzo |
San Eustasio, obispo - Viernes Santo
Aleteia logo
Estilo de vida
separateurCreated with Sketch.

​3 peligros para quien está saliendo de la adicción a la pornografía

US bishops to address ‘pervasive’ challenges of pornography – es

Houdoken

Aleteia Team - publicado el 30/05/14

A poco que bajemos la guardia, los problemas volverán

La Cuaresma está llegando a su fin.
No olvides a Aleteia en tu ofrenda cuaresmal
para que brille la esperanza cristiana.
¡Apoya a Aleteia!

 

DONE AHORA

No sé si os habréis dado cuenta que para los que hemos salido de la pornografía hay una lucha de todos los días. Una atención constante. Sabemos que a poco que bajemos la guardia los problemas volverán.

“¿Sabemos?”. No siempre. Hay tres problemas que creo que son fundamentales para quien está viendo la luz del túnel:

1. La confianza: “Estoy saliendo. He salido. ¡Qué alegría y felicidad!, ¡proclamémoslo a los cuatro vientos! (sólo a los vientos que conocían nuestro problema, claro)”. Nuestro tiempo pasa y bajamos la guardia. La tensión continua
nos ayudó.

Abandonamos “Juego de pornos”, que tanto nos gustaba. Era muy profunda: espadas y camas. Supimos dejar de lado algunos periódicos deportivos con fotos que no venían a cuento. Bajamos el ordenador al comedor para estar acompañados. Nos quitamos internet del Ipad o le pusimos un guardián (eso dolió), etcétera.

Pero nunca estás a salvo. He vivido algo diferente a los demás, y a menudo lo olvido. En mi caso ya era muy complicado ver a ciertas mujeres y admirar objetivamente la belleza de sus cuerpos. “Como había salido ya -me decía- puedo hacerlo como cualquier hombre más. No es justo que no deba…”. Sí y no. ¿Tienes el discernimiento para separar ambas cosas? Esto me lleva al segundo problema:

2. La “ruleta rusa”. Alguna serie volvió a la tele (quizás no todavía “Juego de pornos”, esa aún escuece), internet libre apareció de nuevo en nuestros dispositivos. Como ya no ocurre nada, voy a mirar algo, quizás de refilón, porque, al fin y al cabo, me gustan las mujeres.

Igual ocurre con las portadas de revistas, lugares donde crees que puede haber algo. “Se trata solo de mirar de pasada, luego lo cierro. Al fin y al cabo estoy curado”.

3. “Un día malo”. Sabemos que lo tiene cualquiera, pero cada uno se desahoga a su manera. En mi pasado la huida era sencilla. Sabía que había algo que nunca fallaba. Siempre estaba ahí, esperándome. Me ofrecía una seguridad y no necesitaba de nadie.

Vuelves a casa. El día ha ido fatal. “Ha sido un día de aquellos”, te dices. Algo en el trabajo. Discusión con el jefe. Algún ridículo por el camino. Problemas de dinero. Cansado físicamente. Llegas a casa y no te espera el descanso del guerrero, sino guerrear sin descanso; los demás también han tenido un mal día.

“¡No puedo más! Voy a ver un capítulo de mi serie favorita y me meto en la cama para no salir jamás”. Este es el tiempo más peligroso. Yo he sido entonces más vulnerable. Cuando depresivamente estás hasta las narices de todo lo que antes era vital, ahora parece no importar tanto. Sería tan fácil recurrir a ciertos placenteros hábitos…
Bueno. Aunque lo parezca este no es un post negro. Yo he encontrado pastillas para estas tres dolencias. La confianza es irreparable, cierto. Yo rezaba. Otros tendréis otras maneras. Sin embargo, a veces he caído. Repito, “he caído”, pero ¡no soy esclavo!

No es lo de antes. Ahora quiero salir, ahora he visto QUE SE PUEDE SALIR. Ahora sé el daño que me hace. Ahora sé que tenemos amigos aquí. Caer y levantarse. No hemos vuelto al pasado. Eso es mentira. Volvamos a las armas, eso sí.

Es un toque de atención del que debemos aprender algo. Nunca estamos a salvo porque somos “sólo” hombres (o mujeres), pero sabemos distinguir el bien del mal y sabemos qué hay que hacer. Estamos juntos, no lo olvidéis.

Artículo publicado en el blog porquesepuede

Tags:
pornografiasexualidad
Apoye Aleteia

Usted está leyendo este artículo gracias a la generosidad suya o de otros muchos lectores como usted que hacen posible este maravilloso proyecto de evangelización, que se llama Aleteia.  Le presentamos Aleteia en números para darle una idea.

  • 20 millones de lectores en todo el mundo leen Aletiea.org cada día.
  • Aleteia se publica a diario en siete idiomas: Inglés, Francés, Italiano, Español, Portugués, Polaco, y Esloveno
  • Cada mes, nuestros lectores leen más de 45 millones de páginas.
  • Casi 4 millones de personas siguen las páginas de Aleteia en las redes sociales.
  • 600 mil personas reciben diariamente nuestra newsletter.
  • Cada mes publicamos 2.450 artículos y unos 40 vídeos.
  • Todo este trabajo es realizado por 60 personas a tiempo completo y unos 400 colaboradores (escritores, periodistas, traductores, fotógrafos…).

Como usted puede imaginar, detrás de estos números se esconde un esfuerzo muy grande. Necesitamos su apoyo para seguir ofreciendo este servicio de evangelización para cada persona, sin importar el país en el que viven o el dinero que tienen. Ofrecer su contribución, por más pequeña que sea, lleva solo un minuto.

ES_NEW.gif
Oración del día
Hoy celebramos a...




Top 10
Ver más
Newsletter
Recibe gratis Aleteia.